El colegio de Maside contará con un aula con muebles hechos de cartón

Cándida Andaluz Corujo
cándida andaluz OURENSE / LA VOZ

OURENSE

Santi M. Amil

El arquitecto Roberto Rojas Zambrano diseña un proyecto novedoso y ecológico

24 ene 2018 . Actualizado a las 19:33 h.

A partir de ahora los niños de Maside ya no verán de la misma manera un embalaje de cartón. Además de imaginar barcos que navegan por mares de piratas o bólidos en importantes circuitos de carreras, los pequeños comprenderán que se pueden hacer realidad muchas cosas utilizando estas cajas. Por ejemplo, amueblar un espacio del colegio pensado para su disfrute. Roberto Rojas Zambrano, conocido como El Cartonista, visitó ayer el centro para dar forma a un proyecto ideado por la comunidad educativa: una sala en donde los niños puedan disfrutar de los ordenadores, de manera distendida. «Nós xa temos unha aula de informática no centro, pero temos ordenadores novos e decidimos facer algo diferente. Non queriamos unha aula típica, a idea foi facer un cíber dentro do cole, un sitio para o relax», explica el director, Luis Veloso. A partir de ahí buscaron alternativas para hacer de este espacio un lugar sostenible.

Y apareció la propuesta de Roberto Rojas Zambrano. Parecía hecha a medida. «¿Como nos convenceu? Roberto é arquitecto, deseñador e fai os mobles. É o máis importarte: non merca o cartón senón que o recolle das rúas de Madrid. Enseguida dixemos que si, pero coa condición de que gravase todo o proceso dende que recolle o material da rúa ata que os mobles estean colocados no colexio», relata Veloso. Y así comenzó esta aventura que ayer llevó al arquitecto hasta tierras de Maside para apuntar algunas medidas y peculiaridades del aula en donde actuará. Y si para el colegio es una experiencia única, para el arquitecto, también. «Cuando me llamaron no me lo creía. Porque este es el proyecto perfecto para mí. Tiene mucho que ver con mi filosofía de vida. Y también está muy de acuerdo con la idea de El Cartonista, del reciclaje, de la sostenibilidad y de la educación», subraya el arquitecto.

El cartón que utiliza Rojas Zambrano para sus obras es el típico de embalaje de cajas, como pueden ser los de neveras, bicicletas o televisores, entre otros. El trabajo de El Cartonista tiene mucho de especial. Los muebles que hace son siempre a medida, específicos para cada cliente, según sus necesidades. Es importante una buena relación de entendimiento entre las partes para que el proyecto al que le dé forma sea único. «Yo soy una herramienta más, al final el que va a decidir es el cliente. Eso es lo que me hace diferente. Normalmente la gente tiene un catálogo de cosas diseñadas y sobre eso elige. Yo dejo que el cliente diseñe conmigo, aunque le voy guiando», explica. Y eso han hecho con el colegio de Maside.

«Para mí es importante la educación. Mi iniciativa nació para intentar explicarle a la gente que me rodea que generamos mucha basura que tenemos que empezar a entender como un recurso, no como algo que se tira», relata. El de Maside es el primer colegio en donde actuará con mobiliario, aunque ya había hecho alguna pieza simple, de juego, para un centro educativo. «Esto es todo un desafío», afirma.

Como arquitecto fue víctima de la crisis económica, pero le sirvió para reciclarse en todos los sentidos: «Esta idea venía conmigo toda la vida. Ya en época de bonanza me encontré que tras diseñar un mueble para mi casa, ningún carpintero me lo hacía en menos de un año y me cobraban una barbaridad, porque entonces tenían mucho trabajo. Así tuve la necesidad de hacerlo yo y resolverlo rápido y decidí hacerlo con cartón. Ahí me agarré. Y a partir del 2012, que es cuando nace El Cartonista, mi marca, intento llevar esta idea a cabo». Tras la crisis no ha abandonado la idea. No era algo pasajero, sino que se ha convertido en su seña de identidad.

En el centro de primaria e infantil de Maside construirá un total de siete escritorios altos, a los que dedicará unas ocho semanas, una vez terminado el diseño consensuado con el colegio. «Ahora empezaré a recoger el material para ir poco a poco armando los escritorios. Todo este trabajo lo hago en mi casa de Madrid y luego lo traigo para montarlo aquí», explica. Será un espacio único que esperan poder inaugurar en primavera. A partir de entonces hablar de cartón en el colegio de Maside ya no será lo mismo.