La UD Ourense ganó un partido de dos caras ante el Erizana

Luis Manuel Rodríguez González
LUIS M. RODRÍGUEZ OURENSE / LA VOZ

OURENSE

Santi M. Amil

Tocó sufrir otra vez para cerrar el triunfo en casa

30 dic 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

La UD sumó ante el Erizana tres puntos que lo devuelven a plaza de ascenso directo, después de otro partido demasiado irregular en su feudo de O Couto: 3-0.

El choque tuvo distintas alternativas que pasaron de un dominio total de los discípulos de Fernando Currás en el primer períUD OURENSE 3ERIZANA 0odo -aún sin materializar esa superioridad-, a la zozobra de un segundo tiempo en el cual Alfredo abrió pronto el marcador y el plantel de Baiona se envalentonó hasta el punto de poner en apuros a Pato, antes de que dos tantos postreros certificaran la victoria.

Alfredo, junto a Corzo, Hugo, Codeso, Josu, Carlos y Durán compusieron todo un catálogo de oportunidades que desbarató Toni o se marcharon fuera por poco, pero el zurdo dio en la diana poco después de la reanudación, cuando alojó en la escuadra uno de sus habituales misiles. Al contrario, la pretendida tranquilidad dio paso a demasiados errores locales y alas incursiones de un rival que solo hizo trabajar a Pato en el minuto 13 del primer episodio, por obra de Zamo, pero que comenzó a llegar con claridad, sobre todo en un uno contra uno de Marcos que salió rozando el larguero. La incertidumbre la alejó Aitor, ya en el tramo final, al rematar bien dentro del área. Ya en el alargue Hugo García le puso la guinda al cabecear un centro de Jony.

?Pato, Josu, Codeso (Jony, min 46), Pablo Corzo, Xurxo (Julio Martínez, min 63), Luis, Carlos (Germán, min 58), Oli, Hugo, Rubén Durán y Alfredo (Aitor, min 73).

?

Toni, Antón (Iñaki, min 81), Pedro (Abraham, min 5) Simón, Elías, Tensi (Jano, min 73), Álex, Bastero (Marcelo, min 68), Sidy (Azores, min 62), Zamo y Marcos.

Goles: 1-0, min 48: Alfredo; 2-0, min 86: Aitor; 3-0, min 86: Hugo.

Árbitro: Juncal Moreira, del comité de Pontevedra.

Incidencias: Espectacular ambiente en la noche de O Couto, rebasando nuevamente el millar de aficionados.