El alcalde de Ourense desestimó un aviso del interventor en un asunto de personal

pepe seoane OURENSE / LA VOZ

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Santi M. Amil

El regidor apoyó las tesis que mantenía el jefe de servicio, Javier Rodríguez-Nóvoa

09 oct 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

La provisión de catorce jefaturas de servicio en el Concello de Ourense, firme en la medida en que ha sido publicado en el Boletín Oficial de la Provincia del pasado sábado el correspondiente decreto, ha dejado claro que el alcalde de Ourense, Jesús Vázquez, confía en su jefe de personal, Javier Rodríguez Nóvoa. En entredicho desde que el martes pasado anuló una resolución judicial el nombramiento del jefe de servicio, los hechos demuestran que el regidor confía en su criterio y en su experiencia, incluso en contra de la siempre valorada opinión del Interventor.

La tramitación del expediente para confirmar las jefaturas de servicio del organigrama municipal dio lugar a un reparo del funcionario responsable del control de las cuentas. No era suspensivo, por lo que el asunto podía seguir adelante. El discutido jefe de personal, sin embargo, optó por defender su posición y plantear una discrepancia. De ese modo, el regidor se iba a ver forzado a tomar partido. Y optó por la posición de Rodríguez-Nóvoa, respaldada por los informes de los servicios jurídicos municipales.

Vázquez, días antes de que se conociera la sentencia del Juzgado de lo contencioso 2 de Ourense, dirimió por decreto la discrepancia «en el sentido de declarar que la tramitación realizada en el procedimiento administrativo de provisión de catorce jefaturas de servicio es acorde con la legalidad vigente, de conformidad con lo expuesto en los informes que obran en el expediente».

La diferencia de criterio tiene su origen en la publicación misma de las bases y la convocatoria propiamente dicha. El interventor entiende que ese trámite debería haber sido informado por su departamento. En Recursos Humanos creían que no.

El alcalde resolvió por decreto. El informe de reparo, dice el documento, «no establece ni falta de consignación presupuestaria ni falta de competencia del órgano resolutorio». Y, además, como defendía Recursos Humanos, las bases de ejecución del presupuesto «establecen para los procedimientos de personal un régimen de fiscalización previa limitada que restringe la fiscalización a la comprobación de los extremos anteriormente citados», es decir, consignación presupuestaria y competencia del órgano que resuelve la convocatorio.

El decreto para el nombramiento de los jefes de servicio, que formalmente suscribe la concejala responsable del área de Recursos Humanos, tiene fecha del viernes 29 de septiembre, tan solo cuatro días antes -incluyendo un sábado y domingo- de que se conociera la sentencia que anuló el nombramiento del jefe de personal.

Las designaciones de catorce jefes de servicio del Concello de Ourense se corresponden con las propuestas realizadas por la comisión de valoración.

Catorce puestos

Sistemas de información, Manuel Jorge Villar; Formación Ocupacional e Promoción Económica, Susana Calvo; Benestar Social, Teresa Piñeiro; Recaudación, Juan Manuel Banga; Licencias, Actividades, Aperturas e Disciplina Urbanística, Alfonso Pavón; Medio Ambiente, Gonzalo García; Planeamento e Xestión Urbanística, José Manuel Oliver; Facenda, Javier Freire; Educación, Elías Domínguez; Saúde, Josefa Martínez; Servizos Xerais, José Manuel da Cunha; Cultura, Xuventude e Participación Ciudadana, María José Outeiriño Boán.

UGT alerta del riesgo de nulidad de actuaciones tras suspender el juez la jefatura de RR HH

La sentencia del Juzgado de lo Contencioso Administrativo número 2 de Ourense que anuló el nombramiento de Javier Rodríguez-Nóvoa no es firme. El directamente afectado anunció desde el primer momento que, al margen de la decisión que pudiera adoptar la administración local, él iba a recurrirla ante el Tribunal Superior de Galicia. Pese a ello, desde el sindicato UGT han pedido al alcalde «que a la mayor brevedad se revoquen todos los decretos emitidos por el jefe de servicio de RR HH y se revisen y corrijan todos aquellos actos administrativos que contengan informes vinculantes del jefe de servicio para evitar con ello su anulabilidad y nulidad».

El escrito, suscrito por Nemesio Gómez, hace notar al alcalde que desde la toma de posesión de Rodríguez Nóvoa se han emitido y firmado decretos relacionados con vacaciones, días de descanso, permisos, cambios de destino y expedientes disciplinarios de los empleados municipales, «susceptibles de ser anulables al haber sido decretados y firmados por persona no competente, según sentencia judicial» del pasado 3 de octubre.

Viciados y nulos

Alerta en el escrito el secretario de la sección sindical de UGT en el Concello de Ourense sobre la posibilidad de que los expedientes y asuntos ejecutados por el funcionario «pueden resultar viciados y nulos, al haberse realizado por persona incapacitada por sentencia judicial».

La propuesta para que se revise la actuación del jefe de servicio de recursos humanos la plantea el sindicato directamente al alcalde de Ourense, Jesús Vázquez.