La provincia de Ourense está a la cabeza en siniestralidad laboral en Galicia
26 sep 2017 . Actualizado a las 05:00 h.La protección a los trabajadores parece, en pleno siglo XXI, una asignatura pendiente en los entornos laborales. Pese a que las normativas de seguridad e higiene en el trabajo llevan ya muchos años implantadas y las administraciones vigilan de cerca el cumplimiento de la normativa, lo cierto es que día a día se producen incidentes en horario de trabajo y, de hecho, este año ya se han incrementado un 6 % en la provincia de Ourense. Queda muy lejos, por tanto, el objetivo de alcanzar la cifra de cero accidentes, a la vista de unos datos que evidencian que, además, se están produciendo más muertes en los centros de trabajo que en años anteriores. Así en el primer semestre del 2017 han sido ya cinco los siniestros que se han cobrado la vida de trabajadores, una cifra que ya iguala a la de todo el año pasado. En total, han sido 1.402 los contabilizados entre los meses de enero y junio. El año pasado, en este mismo período de tiempo, se habían producido 1.319 percances y solo uno de ellos se había saldado con consecuencias fatales para el trabajador implicado.
Los datos sitúan a la provincia en la cola gallega de seguridad laboral, ya que tiene el índice de incidencia (representa el número de accidentes ocurridos por cada mil personas expuestas) más alto de toda la comunidad. De hecho, pese a tener menos empleados que Lugo, registra este año más accidentalidad.
La parte menos mala del balance, que ha sido publicado por el Ministerio de Empleo, destaca que, pese a todo, en la mayor parte de los casos los trabajadores accidentados sufren heridas leves. De hecho, además de los cinco mortales, este año solo ha habido otros 21 graves.
Tres de cada diez incidencias se registran en la industria manufacturera
Hay empleos o actividades económicas que parecen presentar un mayor riesgo para los trabajadores y, en el caso de Ourense, esta situación se da en la industria manufacturera. De acuerdo con los datos del Ministerio de Empleo, en las empresas que desarrollan esta actividad se han registrado este año 416 accidentes. Son tres de cada diez de los contabilizados.
En el comercio, la actividad que concentra al mayor número de trabajadores de la provincia, también son relativamente frecuentes los incidentes en jornada laboral. Entre enero y junio se han registrado, de hecho, 200 incidencias en las empresas del sector, que se convierte así en el segundo con mayor siniestralidad de la provincia. Muy cerca, con 195 accidentes laborales, se encuentran las actividades sanitarias y de servicios sociales, tercera profesión con mayores índices de riesgo este año.
Y la que antaño fuera la principal fuente de preocupaciones en materia de siniestralidad laboral, la construcción, ha ido reduciendo a lo largo de los últimos años sus índices de accidentes. A esta circunstancia no es ajeno el hecho de que se ha incrementado la seguridad y la formación de trabajadores, pero tampoco que se ha reducido el número de empleados de forma drástica debido a la crisis. En cualquier caso, hasta julio se han registrado en esa actividad 180 casos.
Todos los demás sectores tuvieron menos de cien incidencias, si bien es significativo que en la administración pública haya habido 91 accidentes laborales este año. La hostelería, por su parte, ha registrado 77 y el sector del transporte y almacenamiento de mercancías, 51. En la agricultura ha habido, por su parte, 48 accidentes, mientras que en las industrias extractivas se han contabilizado otros 39.