El acusado sufría una intoxicación por drogas que le mermó el entendimiento y deberá seguir un tratamiento
25 feb 2017 . Actualizado a las 09:15 h.Un hombre que se presentó en el edificio de Ciencias del campus universitario de Ourense en octubre del 2015 descamisado, desnudo y con heridas, y que había sido acusado de resistencia a la autoridad y lesiones, ha resultado absuelto por la magistrada del Juzgado de lo Penal número 1 de Ourense. Quedó probado que ese día lanzó patadas y puñetazos a dos policías locales que se le acercaron y que previamente había golpeado en la espalda a un catedrático de dicha facultad. Las lesiones causadas a los tres fueron leves.
Episodios repetidos
El sospechoso, J. M. D. M., fue ingresado unos días después del suceso en el servicio de psiquiatría del Complexo Hospitalario Ourensán al informarse que había sufrido episodios repetidos de agresividad física y verbal en los dos últimos meses. Dirigía sus agresiones hacia personas y objetos con «importante escándalo público», como ocurrió con el hecho que motivó su detención y encausamiento penal.
En el hospital ourensano se le diagnosticó un trastorno mental psicótico producido por el consumo de alcohol, cocaína, cannabis, síndrome de abstinencia y trastorno de la personalidad, además de tener rasgos antisociales, impulsivos y deterioro cognoscitivo, según recoge la sentencia, conocida ayer.
En abril del año 2016 fue examinado por el médico forense, quien concluyó que las agresiones y altercados protagonizados por el acusado estaban relacionados con su trastorno por intoxicación más que por el de la personalidad. El especialista consideró que existía una «modificación de la capacidad de comprensión en relación al grado de intoxicación, no a los problemas de fondo de trastorno de la personalidad».
La juzgadora que sentenció el caso tuvo en cuenta que las declaraciones de los agredidos, profesor y agentes, se mantuvieron ante la policía y durante la instrucción y el juicio. Pero la magistrada también apreció las circunstancias eximentes de que, debido a la intoxicación por consumo de bebidas alcohólicas o estupefacientes, el encausado tenía disminuidas sus facultades psíquicas, por lo que estaría exento de responsabilidad criminal debido a un trastorno mental transitorio o por intoxicación plena por las lesiones causadas a las víctimas y por la resistencia a la autoridad.
Medidas con libertad
En tal sentido, la juez acordó la absolución del encausado pero decidió que se adoptaran otras medidas no privativas de libertad, con la obligación de seguir un tratamiento externo o someterse a un control médico periódico en relación a la patología que padece y a su adicción a sustancias estupefacientes. El tratamiento deberá seguirlo durante seis meses.
Los agredidos en la facultad, que habían sufrido contusiones leves, habían renunciado en el procedimiento a ejercer acciones civiles o penales contra el acusado.