Los artesanos se implican en la inserción laboral de colectivos en riesgo de exclusión
OURENSE
El colectivo de profesionales se sumó al plan Incorpora
01 feb 2017 . Actualizado a las 05:00 h.«Los artesanos no tenemos el potencial de las grandes empresas, nuestros negocios tienen una escala mucho menor, pero la responsabilidad y la solidaridad forman parte de nuestra identidad profesional y con estas dos herramientas vamos a ser capaces de ayudar». Así resumía Olga Santos Pereira, presidenta de la Asociación de Artesáns de Ourense, el motivo por el que este colectivo ha decidido sumarse al proyecto Incorpora de la Obra Social La Caixa, que gestiona la delegación provincial de Cruz Roja y que busca ayudar a personas con especiales dificultades para entrar en el mercado laboral.
La asociación cuenta en estos momentos con 34 artesanos. La crisis, según apunta su presidenta, se ha cobrado en los últimos años algunas bajas «a pesar de que la cuota es pequeña», pero también ha acercado savia nueva al colectivo «con jóvenes que traen nuevas tendencias y nuevas técnicas, lo cual siempre es positivo». Olga Santos cree que algunos artesanos pueden tener capacidad y necesidad de incorporar a trabajadores en sus talleres, pero opina que el mayor valor que va a aportar el colectivo a los participantes de este plan «es el de la formación en distintas disciplinas y oficios que puede encaminarlos también hacia el autoempleo a medio plazo». La joyería y los oficios del artesanato del cuero, madera y el textil son los que tienen más peso en un sector que tiene representantes en toda la provincia. «En la ciudad quedan los menos porque hoy tener que alquilar un local para instalar un obradoiro aquí es prohibitivo; muchos han elegido vivir en el rural y montar el taller en su vivienda», matiza Olga Sánchez.
La presidenta del colectivo ourensano, miembro también de la Comisión de Artesanía de Galicia, recuerda además que se está trabajando para renovar el listado de oficios artesanales para incluir nuevas modalidades que ya en otras comunidades tienen su reconocimiento, como la artesanía en alimentación o el segmento de jabones y perfumes «que aquí, quienes se dedican a ello, no pueden obtener la carta de artesano porque no están incluidos en la normativa, que es ya del año 92 y necesita una actualización»
El acuerdo firmado ayer permitirá una colaboración activa del colectivo de artesanos con el plan Incorpora, un programa de formación y empleo para personas pertenecientes a colectivos en riesgo de exclusión, como los parados de larga duración, jóvenes en situación de vulnerabilidad social, inmigrantes, ex reclusos o víctimas de violencia de género, por ejemplo. Desde su puesta en marcha los resultados de este programa han sido muy positivos. Solo entre las mujeres -Cruz Roja trabaja con distintos perfiles como víctimas de violencia de género, mayores de 45 años, con responsabilidades familiares no compartidas, trabajadoras de la economía informal e inmigrantes- el pasado año hubo 92 participantes, de las que 56 lograron acceder al mercado laboral.