Ante la imposibilidad del cambio de fecha afronta contra el Vilalonga su segundo compromiso en menos de 48 horas
06 dic 2016 . Actualizado a las 05:00 h.«Las rotaciones son cosa de la tele, aquí tenemos que ir cada semana con lo mejor que tenemos y, a día de hoy, son 18 jugadores de los que dos o tres no están en sus mejores condiciones, pero ayudan al equipo», palabra de Javi Rey.
El entrenador del Centro de Deportes Barco no es de los que se va a parar en lamentos y, de hecho, partía hacia Valdeorras ayer con la mente puesta en el mejor once posible para recibir esta tarde (16.00 horas) al Vilalonga, pero sí reconocía su desacuerdo con la imposición de un calendario que obliga a equipos de Tercera División a jugar dos partidos de fútbol en menos de 48 horas: «Hay estudios fisiológicos que demuestran que el cuerpo humano no se recupera del todo de un esfuerzo como el realizado en este deporte».
La entidad barquense intentó cambiar tanto el partido de Ordes del pasado domingo, como el de hoy, con la alternativa de disputarlo el jueves, pero ninguno de sus dos rivales lo aceptó, amparándose en la fecha oficial del calendario.
Los de Calabagueiros estarán pendientes de Rubén García, Deivis o Tato, que salieron renqueantes de Vista Alegre y de un Javi Recamán que solo jugó los últimos cinco minutos, con un pie inflamado: «Hablaré con ellos en el entrenamiento y, al final, serán sus sensaciones las que me aclararán si están disponibles, con esa información decidiré esta noche -por ayer- el mejor once posible, pero sé que volverá a ser un equipo muy competitivo, porque con estos jugadores voy al fin del mundo».
El joven técnico matiza que a pesar de los resultados adversos de las últimas semanas o los puntos que se escaparon en los minutos finales de los partidos ante Arousa y Ordes, la sensación general que da el plantel es buena: «Y si seguimos así, es cuestión de semanas que también se refleje ese juego en el marcador». Antes, otra vuelta de tuerca.