Una jornada previa a la Feira de Amandi sirvió para hablar del polémico invento
18 mar 2016 . Actualizado a las 22:01 h.El salón de actos del centro sociocultural de Sober (Lugo) está casi lleno. Un aforo inusual para una jornada sobre alternativas al vino tradicional, por mucho que forme parte de los actos del Mes do Amandi. Las organiza la Estación de Viticultura e Enoloxía de Galicia, cuya sede está en Leiro. Aritz López es el causante de tanto revuelo. Las cámaras persiguen por los pasillos a uno de los jóvenes creadores del polémico vino azul. Va de una entrevista a otra en la frenética media hora del café. En plena sesión fotográfica, una señora se le acerca para preguntarle de dónde es. «De Bilbao», responde con una sonrisa.
-De Bilbao tenía que ser el inventor del vino azul.
-[Risas] Bueno... La empresa [Gik Blue] tiene la sede en Bilbao. Pero solo yo nací allí. Somos un grupo de veinteañeros, sin vinculación ni tradición familiar relacionada con el vino. Ni siquiera nos gusta. Si acabamos en este negocio fue porque vimos que era un mundo demasiado reglado, en el que hacía falta una pequeña vuelta de tuerca. Solo queremos innovar, aunque algunos definan lo que hacemos como una blasfemia.
Gik no es exactamente un vino, al menos con la legislación en la mano. La definición correcta es «bebida aromatizada sobre base de vino». La empresa está integrada por expertos en informática, diseño y gestión de negocios. No tienen viñas ni bodega. Compran el vino a productores de diferentes zonas que permanecen en el anonimato. Se vende a través de Internet y el precio de la botella es de diez euros.
-A algunos expertos Gik le sabe a vino con gaseosa. ¿Molesta o suena a cumplido?
-Hemos buscado algo fácil de beber, suave, dulce adaptado a paladares como el nuestro, que prefieran la cerveza o los combinados antes que el vino tradicional. Pensamos que iba a ser un producto muy joven, pero la realidad nos ha sorprendido muy gratamente. Predominan los compradores de entre 25 y 45 años y el porcentaje de hombres y mujeres está igualado.
-La teoría dice que el azul es color tabú en los alimentos.
-Ni idea... No sé si has oído hablar del libro La estrategia del océano azul. Fue lo que nos inspiró. En mercados muy saturados, las empresas son como los tiburones. Compiten por los pocos peces que hay y el océano acaba tiñéndose de rojo. La alternativa para encontrar océanos azules está en la innovación.
-La metáfora es sugerente, pero les han caído muchos palos.
-Nosotros pensamos que en el mundo del vino hay sitio para la innovación. Pero existen puntos de vista de muy radicales. Es un sector muy purista, poco amigo de los cambios.
-¿Por eso no se conocen las bodegas con las que trabajan?
-Pues sí. Les hemos propuesto un par de veces grabar un reportaje, pero son muy reacios. Temen perder clientes de los otros vinos que elaboran.
-¿Comercializan vino azul fuera de España?
-Llevamos en esto menos de un año. La idea inicial era dejar la exportación para más tarde, pero alguien tradujo al inglés un artículo sobre nosotros en un blog y comenzaron a llegar pedidos de fuera. Vendemos en Suiza, México, China, Japón, Singapur... Hasta nos están llegando encargos desde África.
-En las jornadas se habló de experiencias fallidas de coloración de vinos sin alcohol que demandan países árabes. ¿Cómo lo consiguieron ustedes?
-El vino azul tiene detrás un trabajo muy importante de I+D. Contamos con el apoyo de la Universidad del País Vasco, que puso a disposición del proyecto su laboratorio y a un equipo de investigadores.
-¿De verdad recomendaría hacer vino azul en la Ribeira Sacra?
-Respetamos mucho las zonas que tienen tanta historia. El vino tradicional tiene su espacio. Nosotros proponemos otra cosa. Algo que se pueda disfrutar sin un paladar culto, sin mucha experiencia previa o conocimientos de enología.
-¿También hay maridajes para el vino azul?
-[Risas] Creo que va bien con sushi y guacamoles, en serio. Pero lo recomendamos sobre todo con buena música y con buena compañía.
Color
Se consigue con pigmentos de origen orgánico sintetizados en laboratorio. Proceden de la piel de la uva y de una planta
Sabor
El dulzor del vino se debe a edulcorantes no calóricos
Alcohol
La graduación alcohólica es baja, de 11,5