Concluyeron las jornadas organizadas por el instituto de la Diputación para dar a conocer el patrimonio en torno al mundo del tren que hay en Ourense
23 oct 2015 . Actualizado a las 20:07 h.El patrimonio ferroviario de Galicia puede ser un recurso turístico que permita lanzar ofertas turísticas alternativas de calidad, ayudar a crear empleo y desestacionalizar el sector. Fue una de las conclusiones que se sacaron después de las dos jornadas ferroviarias desarrolladas en Baños de Molgas que organizó el Inorde dentro de su proyecto Estaciones Vivas.
En la segunda jornada celebrada ayer, el vicepresidente de la Asociación Europea de Ferroviarios, Julio Álvarez, defendió que el modelismo tiene miles de aficionados en Europa y es un sector altamente tecnológico y que genera empleo. Carlos Tavares, presidente de la Asociación de Amigos do Ferrocarril de Ourense, destacó la importancia del patrimonio ferroviario en sus aspectos cultural e industrial. Mencionó ejemplos como el «tren de la fresa», el más antiguo de los trenes turísticos, o el tren de lujo «Al-Andalus». La gastronomía es otro factor a explotar, como dijo el periodista Francisco Gil en otra ponencia. Ya se hace en los trenes turísticos gallegos, dijo, donde se potencia la gastronomía local.
El responsable de Trens Turísticos de Renfe, Luis José Cao, resaltó el éxito que están teniendo estos productos, reflejado en el lleno que consiguen. Tanto este proyecto como el de Estaciones Vivas, continuidad del Estaciones que permitió restaurar seis inmuebles ferroviarios en desuso, han tenido un efecto positivo sobre el territorio, según se dijo en la mesa redonda que cerró el encuentro.