Se estima que esta patología, que puede llegar a ser altamente incapacitante, afecta a entre el 2 y el 5 % de la población
17 abr 2015 . Actualizado a las 05:00 h.El abordaje quirúrgico de la patología de incontinencia fecal centró la quinta jornada organizada por la Unidad de Cirugía Coloproctológica del CHUO, que se desarrolló ayer retransmitiendo varias operaciones desde los quirófanos de este centro sanitario y que fue seguida por 80 cirujanos y médicos residentes, tanto gallegos como de otras comunidades españolas y de Portugal.
«Esta actividad formativa es muy demandada por los profesionales y especialistas, porque ofrece una visión, tanto teórica como práctica, de un conjunto de procesos que requieren una gran especialización tanto para su diagnóstico correcto como para realizar los tratamientos, en muchos casos, sofisticados», explica el jefe de sección, Alberto Parajó.
Se estima que entre un 2 y un 5 % de la población sufre incontinencia fecal, que no es una enfermedad en sí misma, sino que es un síntoma que puede estar derivado por múltiples causas. «A la gente le da vergüenza explicar que tiene este problema y muchas veces ni se lo cuenta al médico», señala Parajó Calvo para explicar que no hay cifras sobre la incidencia real de una patología «que afecta de forma importante a la calidad de vida del paciente y puede llevar a una situación personal y socialmente incapacitante», apunta.
De hecho, el único dato cierto
es que en el CHUO se ven una media de 25 nuevos casos por año, pero el especialista cree que, aparte del reparo del paciente, influye también que «ha sido infraestimada, no se le daba importancia a veces ni desde el propio médico, y se consideraba un padecimiento por ejemplo normal ligado a la edad avanzada».
El tratamiento es variado; desde medidas de higiene dietética a tratamiento farmacológico, neuromodulación de raíces sacras, o implantes, entre otros. No todos los casos son susceptibles de solución quirúrgica, pero Parajó señala que jornadas como la de ayer son «muy demandadas por los profesionales y especialistas, porque se ofrece una visión, tanto teórica como práctica, de un conjunto de procesos que requieren una gran especialización tanto para su diagnóstico correcto como para tratamientos, en muchos casos, sofisticados», matiza.