El fiscal bajó a seis años su petición de cárcel a la acusada de intentar intoxicar a su marido

La Voz OURENSE

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MIGUEL VILLAR

La defensa pidió la absolución y resalta que «casa mal con la idea de asesina alevosa» que la imputada hubiese intentado matar al hombre, suministrándole antidepresivos ocultos en agua o en zumo, cuando él estaba hospitalizado

13 feb 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

Manuel R. A. vive, pese a la parada cardíaca que sufrió el 13 de enero del 2013, porque ese episodio se produjo mientras estaba hospitalizado y pudo recibir atención urgente e inmediata.  Los forenses no tienen duda. Que esa situación fuese consecuencia de una intoxicación por haber tomado ?en contra de su voluntad? antidepresivos ocultos en puré, en leche, agua o zumos supuestamente suministrados por su exesposa, María José G. P., para acabar con su vida, lo dirán los magistrados de la Audiencia de Ourense. El fiscal, aunque ayer rebajó de once años y medio a seis años su petición de condena por asesinato en grado de tentativa, mantuvo su tesis, en el sentido de que era ella quien le daba tres tipos de sustancias. Lo hizo, según sus impresiones, con anterioridad al primer ingreso en el CHUO el 8 de enero del 2013 e insistió, tras haberse recuperado de ese episodio de pérdida de conciencia, mientras estaba hospitalizado. El segundo caso, parada cardíaca incluida, se produjo el 13 de enero. La acusada, cree el fiscal, le daba los medicamentos ocultos en aguas o zumos. En esta ocasión, sin embargo, detectaron en el hospital los restos de antidepresivos, por lo que dieron cuenta al juzgado. Pura rutina, pero fue así como arrancó una causa por la que la acusada nunca estuvo privada de libertad. Cuando volvían a casa tras una nueva visita hospitalaria el 10 de marzo por un golpe en la cabeza, confesó Manuel a la acusada sus sospechas. Sufrió ella entonces una crisis de ansiedad, precisó hospitalización y rompió la pareja.
La defensa de María José mantiene que era el hombre quien tomaba los antidepresivos de su mujer. «Casa mal con la idea de asesina alevosa haber intentado matarlo en un hospital», dijo en su informe el letrado, para quien, de ser buena la tesis del fiscal y del exmarido, en el sentido de que desconfiaba de la mujer antes incluso del primer ingreso, Manuel era un irresponsable. «Haber dejado a su madre en manos de la persona que lo podía matar», pues la tuvo en su casa, al cuidado de la mujer de quien sospechaba que lo podía envenenar, para que se recuperara tras recibir un marcapasos.
El fiscal rebajó su petición por las circunstancias que aprecia en la acusada, aquejada de crisis de ansiedad y dolores crónicos.