La conselleira de Medio Ambiente, Ethel Vázquez, ha firmado el documento con el alcalde, Miguel Bautista
31 jul 2014 . Actualizado a las 20:47 h.Las normas que desde hace casi 30 años regían el urbanismo de Petín han quedado hoy superadas. La conselleira de Medio Ambiente, Territorio e Infraestruturas, Ethel Vázquez, ha firmado esta mañana con el alcalde, Miguel Bautista, la aprobación definitiva del Plan Xeral de Ordenación Municipal. Según Vázquez, se trata «dun plan xeral que mellora, amplía e perfecciona notablemente as posibilidades de crecemento do termo municipal».
El PXOM clasifica como suelo rústico protegido más del 97 % de la superficie municipal, «co que se garante os seus valores físicos e ambientais que en parte tiñan xa o seu reflexo en figuras de protección como LIC do Macizo Central, a contorna do Encoro de San Martiño e 2 áreas prioritarias de conservación de aves». El suelo de núcleo rural define un 1,3 % de la superficie municipal (cerca de 400.000 metros cuadrados), donde se reconocen los 14 núcleos rurales existentes fuera del núcleo urbano, en su mayor parte de naturaleza tradicional (un 77 %), pero también recoge algunos de naturaleza compleja, y fija 3 núcleos rurales (Santoalla, O Pacio y Aldea) en los que su protección se tendrá que desarrollar mediante un plan especial, según los datos avanzados desde la Xunta.
Como suelo urbano aparece un 1 % del territorio (323.000 metros cuadrados), que se corresponde todo con el actual núcleo de Petín. La mayor parte de este suelo urbano es consolidado, y se establecen ordenanzas específicas para el casco viejo, residencial de intensidad media, residencial abierta y viviendas sociales. La capacidad residencial total es de 1.270 viviendas, de las que un 41 % (521) son las previstas para el futuro, es decir, no están construidas.
En el PXOM se reserva un ámbito como urbanizable no delimitado, de 110.000 metros cuadrados, para uso industrial. Está en la parroquia de Freixido, al borde de la Ou-533. Además, el plan de urbanismo incrementa las previsiones que marca la Ley en lo relativo a la dotación de espacios libres y zonas verdes, que aumentan un 11 %; y de forma especial en lo que se refiere al equipamiento comunitario, que con más de 48.000 metros cuadrados llega a multiplicar por cinco las exigencias que impone la normativa.