Varios alcaldes confiesan que sugerían a Baltar qué personas podía enchufar

Miguel Ascón Belver
Miguel Ascón OURENSE / LA VOZ

OURENSE

Miguel Villar

«Recomendé a diez vecinos a ver si les daba trabajo», dijo el regidor de Paderne

04 jul 2014 . Actualizado a las 04:40 h.

José Luis Baltar no decidía en solitario a quiénes contratar en la Diputación ourensana. El expresidente de la institución recibía las recomendaciones de su entorno de confianza, entre ellos, el ejército de alcaldes del PP en la provincia. De hecho, parte de los 104 contratados por los que Baltar está siendo juzgado fueron destinados a trabajar en distintos ayuntamientos ourensanos. Los regidores de trece de ellos fueron ayer los protagonistas de la penúltima jornada del juicio y todos admitieron que esas contrataciones las gestionaron directamente con el expresidente.

Casi todos afirmaron que se limitaban a exponerle a Baltar las necesidades de personal que tenían sus ayuntamientos, pero tres admitieron que en las reuniones con el expresidente se hablaba de nombres concretos. Especialmente ilustrativo fue el interrogatorio del fiscal, Florentino Delgado, al regidor de Paderne de Allariz, José Manuel Fernández Gómez, cuando este admitió que medió ante el expresidente para que contratase a diez vecinos de su municipio:

Fiscal. ¿Está diciendo que recomendó a diez personas?

Alcalde. Sí, recomendé a diez personas para ver si les daba trabajo en la Diputación.

F. Las recomendaría con su nombre. ¿O cómo?

A. Sí, más o menos.

F. ¿Le pasaría una lista con nombres?

A. No, no, lista no.

F. ¿Le dio al presidente los nombres de viva voz?

A. Sí.

F. Porque le parecían bien esos nombres, ¿no?

A. Para el trabajo que había que realizar, sí.

F. Pero, ¿hizo usted algún proceso de selección? ¿Los entrevistó?

A. No, no.

F. Entonces, ¿por qué esos diez? Podía haber propuesto quince o veinte.

A. Sí, pero era la gente que me venía allí y que tú sabes que estaban ahí, en el paro.

F. ¿Solo hay diez personas en el paro en su municipio o hay más?

A. Probablemente había más.

F. ¿Por qué esos diez entonces?

A. Porque era la gente que venía junto a mí a pedir.

También el exalcalde de Celanova, que ahora es diputado autonómico, admitió haber hablado de personas concretas con Baltar para organizar las contrataciones de su Ayuntamiento. Antonio Mouriño, sin embargo, se resistió. Primero dijo: «Nunca hablamos de nombres». Y después: «Alguna vez los nombraría y otras no».

Otros regidores también se lo pusieron difícil al fiscal en su interrogatorio, como el de A Veiga, Edesio Yáñez. En su caso, la Diputación contrató a una persona y, cuando le preguntaron por el elegido, lo primero que dijo es que lo conocía y que estaba en el paro. Sin embargo, aseguró que alguien -no supo aclarar si el Concello o la Diputación- pidió datos al Inem y que justo esa persona era la única demandante de empleo con una titulación adecuada. Según aseguró Yáñez, después de «insistir mucho» José Luis Baltar contrató a ese parado concreto para trabajar en su Concello.

A excepción del único de los alcaldes citados ayer que no es del PP, Xabier Oviedo (de Compromiso por Galicia), todos coincidieron en loar la ayuda de Baltar en materia de personal. «Entre nosotros comentábamos que era un hombre solidario con nuestras emergencias», dijo, por ejemplo, José Antonio Feijoo, regidor del Concello de Baltar. Esas palabras las pronunció durante el juicio, pero antes insistió también en esa idea ante los medios de comunicación que le preguntaron a las puertas del Pazo de Xustiza: «Isto é todo por un erro administrativo dun home que se deixou levar pola súa bondade».

Ellos sí lo hacen con publicidad

Una pregunta a la que tuvieron que responder ayer todos los regidores citados como testigos fue si también ellos contrataban en sus respectivos concellos a las personas que iban a pedírselo personalmente. La mayor parte de los regidores fueron cautos en su respuesta y todos dijeron que, si lo hacían, era legalmente. «Puede coincidir. Me lo piden muchos y después entran los que las bases dicen», señaló Emilio José Pazos, de Trasmiras. La nota discordante la puso el de Boborás, Cipriano Caamaño, que admitió haber colocado. «Hace muchos años. Ahora no, ahora ya no contrato», precisó ante la jueza.

Por otro lado, en el juicio de ayer intervinieron también tres supuestos enchufados que habían sido citados en días previos y no se habían presentado. Apareció la testigo que parecía no existir, según había dicho la jueza, y también Concepción Outeiriño, maestra de telares contratada por la Diputación. En su caso, el fiscal incidió en el hecho de que considerase suyo ese puesto. Fue así porque, cuando le preguntaron si al presentar su currículo pidió algún trabajo concreto, dijo: «Para mi plaza».