El cese del sargento de la Guardia Civil de Bande se presenta como inminente

p. s. ourense / la voz

OURENSE

La ausencia de debate y apoyo político al funcionario facilita la destitución por parte de la Dirección General

16 abr 2014 . Actualizado a las 06:55 h.

Cuando la Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC) salió públicamente en defensa del sargento del puesto de Bande, sobre quien pesa un expediente abierto por orden de la Dirección Adjunta Operativa de este cuerpo del pasado 12 de marzo, en esta organización ya tenían claro que el futuro laboral de su compañero estaba lejos de esa localidad. El expediente aún no está cerrado, al menos sobre el papel, pero todos los indicios apuntan a que el cese será inminente.

En Twitter, desde una cuenta que se dice personal y sin carácter oficial, que remite a la institucional de la Guardia Civil para la presentación de eventuales denuncias, se presentaba ayer el caso, apoyado con una noticia de agencias, afirmando el cese del sargento «enfrentado con la diputada del PP», con la apostilla «la sinvergüenza y prepotente se sale con la suya». El afectado permanece, no obstante, en su puesto. Al menos así es por ahora.

Una vez que le comuniquen formalmente la decisión, le quedará a este funcionario el derecho a recurrir, pero en cuestión de horas deberá abandonar su destino actual y esperar uno nuevo, dicen desde la AUGC. Los tres meses de plazo para la resolución de un expediente de estas características, apuntan en medios no oficiales de este cuerpo, se habrán recortado de una forma que se considera excepcional.

Política

El hecho de que los tres grupos políticos mayoritarios hayan coincidido, en distintos momentos, a la hora de criticar la rigurosa aplicación de las normas por parte del sargento de la Guardia Civil de Bande, anticipa la ausencia de enfrentamientos partidistas. El BNG había llevado el caso al Senado durante el último gobierno del PSOE y la socialista Laura Seara hizo lo propio en el Congreso en una línea muy similar a la que años antes había utilizado el exsenador Xosé Manuel Pérez Bouza, sin que entonces el PSOE atendiera las quejas y peticiones del nacionalista.

En el PP, por su parte, la distancia es total. La diputada Ana Belén Vázquez personaliza la oposición abierta al exceso de celo del sargento de la Guardia Civil. Tal es la distancia que en el Concello de Bande -con regidor popular, José Antonio Armada- es público que la administración local apoya a los vecinos que desean recurrir las multas que tramita la Guardia Civil. Que el Concello se haya desentendido de la celebración de la festividad del Pilar es otro síntoma de un distanciamiento institucional que ha sido suficiente para que la Dirección General de la Guardia Civil tome sus medidas. Y ello pese a que ninguna queja o denuncia contra el funcionario haya prosperado en los juzgados.