La imputación por Bedoya aleja de los focos al alcalde de Ourense

Rubén Nóvoa Pérez
RUBÉN NÓVOA OURENSE / LA VOZ

OURENSE

Santi M. Amil

Ediles díscolos alegan una apretada agenda para plantar al regidor

19 mar 2014 . Actualizado a las 07:10 h.

La imputación por las obras de la calle Bedoya ha dejado al alcalde de Ourense fuera de circulación. Nueve días después de que se conociera el auto del juez Piña -citaba como imputada por prevaricación administrativa a toda la junta de gobierno del 2008 por contratar la reforma en un procedimiento negociado, urgente y sin publicidad- el regidor socialista y por aquel entonces concejal de Economía en el bipartito ourensano se mantiene alejado de los focos.

¿Qué opina el alcalde de esta imputación por una obra adjudicada por sus exsocios del BNG? Es difícil saberlo a ciencia cierta, ya que su único pronunciamiento fue por vía de una nota de prensa de su departamento de comunicación. Se le atribuían en ese escrito unas declaraciones en las que mostraba «absoluta tranquilidade». También expresaba su «máximo respecto aos órganos xudiciais no seu labor de investigación» y concluía asegurando que «comparecerei gustoso para dar todas as explicacións necesarias». Ni una palabra más hasta hoy. Desde entonces, el regidor ourensano ha desaparecido de la agenda pública de actos municipales. Su última presencia oficial fue en el pleno municipal de marzo, justo tres días antes de que se conociera la nueva crisis del gobierno ourensano. Tampoco acudió a actos a los que fue invitado, como el homenaje de los vecinos de As Curuxeiras a las víctimas del 11-M. Solo la apertura del Festival Pórtico do Paraíso le sacó de su aislamiento mediático. Se sentó en primera fila aunque su presencia no fue anunciada.

Pese a la desaparición de la agenda pública del alcalde desde que estalló el caso Bedoya, fuentes próximas a la alcaldía aseguran que no se trata de ninguna estrategia política y que es una coincidencia. Las mismas fuentes afirman que el regidor mantiene su actividad de puertas para adentro en su despacho. Ayer mismo, concluyen, cumplió con su delegación de competencias con Policía Local y Bomberos.

Sigue el plante de los díscolos

La imputación del alcalde y de las dos tenientes de alcalde, Marga Martín y Áurea Soto, no ha contribuido a amainar la división interna del PSOE en el Concello de Ourense.

Ayer se celebró una nueva reunión del grupo municipal a la que no asistieron los ediles denominados díscolos. Se mantiene, por tanto, el pulso abierto de María Devesa, Susana Bayo, Alfonso Vilachá, Mónica Vázquez y Antonio Rodríguez Penín. Sostienen que no están obligados por el partido a acudir a estas reuniones y alegan, en algunos casos, una apretada agenda en sus concejalías.