Metílico, colza y, ahora, el pienso para perros

José Manuel Rubín SIETE DÍAS, SIETE VOCES

OURENSE

01 sep 2013 . Actualizado a las 06:00 h.

Al sentarme a teclear, tras el paréntesis agosteño, esta crónica de los siete días de Ourense contados por La Voz, pensé en el regreso a la Universidad de Fray Luis de León después de cinco años de cárcel. Él dejó en la historia el clásico «decíamos ayer?» como nexo entre dos momentos del siglo XVI en el que nada había cambiado. El latiguillo me vale para reflejar que todo sigue igual desde la última crónica. Decíamos ayer, y decimos hoy, que Ourense pocas veces es imprevisible. Decíamos ayer, y decimos hoy, que todo se repite con monótona rutina. Los incendiarios volvieron a hacer su agosto, la Vuelta a España mostró, de nuevo, una Galicia radiante olvidándose de la provincia del interior y los políticos locales siguieron con sus rifirrafes habituales. De esa uniformidad me sacó el titular de La Voz del pasado martes: «Investigan si pienso en mal estado mató decenas de perros en Ourense». Ahí estaba de nuevo la provincia como protagonista de una crisis alimentaria aunque ésta, afortunadamente, se cebaba en el mejor amigo del hombre. Como si fuese un sino de Ourense. Un día fue el metílico, otro la colza y ahora el pienso para perros Good Nutrition comercializado de forma harto sospechosa sin que la Administración haya clarificado el problema. Más allá de las muertes perrunas, nada nuevo bajo el sol. Ni la foto de los cuatro portavoces del Concello de Ourense uniéndose para destinar 3 millones de euros al empleo nos saca del sopor veraniego. Ya se sabe, porque el Plan E de ZP fue su escuela, lo que hacen con el dinero público los burócratas/funcionarios que gobiernan la capital. Los políticos tendrían que destinar fondos a unos cimientos, en infraestructuras y servicios, que posibilitasen que los empresarios generaran puestos de trabajo con vocación de continuidad. Me temo que estemos ante un nuevo reparto demagógico de fondos millonarios que después escasean para atenciones básicas.

La frase Llamativa, por su ausencia de rigor, la del secretario provincial del PSOE y diputado autonómico, Raúl Fernández: «A Xunta non fixo absolutamente nada por previr os incendios». Utilizar un «absolutamente nada» obviando las 5.708 personas movilizadas, los 32 aviones y helicópteros, los 360 vehículos o los 20 millones destinados a convenios con los xoncellos (entre ellos muchos socialistas) para prevención y creación de brigadas municipales es indicio de ignorancia supina, mala fe o, quizás, muestra del vicio español de intentar dañar al adversario por encima de razones. Estuvo a años luz de la alcaldesa en funciones de Ourense, Áurea Soto, también socialista, que cuando el fuego asediaba la capital, dijo que «todos sabemos que en Galicia hai unha porcentaxe moi alta de incendios provocados e pouco a pouco temos que ser conscientes desto e da responsabilidade de todos». Frase en las antípodas de la absolutamente extemporánea, demagógica y falsa del jefe provincial del PSOE.