El incidente ocurre después de que el TSXG rebajase la pena al acusado
15 feb 2013 . Actualizado a las 07:25 h.Las heridas vuelven a abrirse en Toén. Apenas una semana después de que se conociera la sentencia del Tribunal Superior de Xustiza, por la que se considera que el crimen de Laura Alonso fue un homicidio y no un asesinato, han aparecido numerosas pintadas en algunas zonas públicas del ayuntamiento, lugar de residencia tanto de la víctima como de su homicida, contra Javier Cruz. El autor del crimen ha visto como la condena de 18 años de prisión a la que había sido sentenciado en un primer momento, se ha reducido hasta los 15 gracias a esta última resolución.
A apenas dos kilómetros de la localidad de Xestosa, en la que residía la joven de 19 años, pueden verse desde hace pocos días pintadas en las que se califica de «asesino» a Cruz, y que se han realizado no solo sobre varios puntos del asfalto de la OU-87, sino también en una torre transformadora de electricidad y hasta en algunas señales de tráfico.
La muerte de Laura fue un episodio que conmocionó a todo el municipio. Su cuerpo sin vida fue encontrado a finales de agosto del 2009 en una finca de Toén, cinco días después de que desapareciera de su casa. Un día después su exnovio fue detenido y, tras varias horas en los calabozos, terminó confesando que había sido él quien la había matado. En el juicio celebrado el pasado mes de septiembre en la Audiencia provincial Cruz mantuvo que había sido un suceso fortuito, pero un jurado consideró que lo ocurrido había sido un asesinato, por creer probado que mató a la joven usando una chaqueta para asfixiarla y sin darle oportunidad alguna de pedir auxilio. Esa decisión ha sido ahora matizada en A Coruña, lo que habría provocado reacciones vandálicas en el pueblo de ambos.