Y el BNG vio la luz cinco años después

José Manuel Rubín SIETE DÍAS, SIETE VOCES

OURENSE

25 dic 2012 . Actualizado a las 15:52 h.

No quiero imaginar las zozobras que a Ourense, y al partido, le hubiese evitado la actitud mostrada por los nuevos ediles del BNG en el pleno del jueves al oponerse al incremento de las tasas fiscales propuesto por el PSOE. Es una visión simple circunscribir lo ocurrido a una eventual pinza BNG-PP contra el gobierno socialista. Los ediles nacionalistas están en las antípodas de lo que creen, dicen y hacen los del PP pero una ciudad hay que gobernarla con la reflexión y la decisión ajustada a los intereses de la mayoría. Esto es lo que había olvidado el BNG en los cinco años de gobierno. Formó una piña con los socialistas a pesar del despilfarro en obras innecesarias, la concesión de sospechosos concursos millonarios y un largo etcétera de unánimes decisiones. La cordura vuelve ahora a sus filas como se vio (¡otro ejemplo!) en la propuesta de terminar con la gratuidad para jubilados y jóvenes en el billete del bus urbano. Rectificó la vigente situación propiciada por el Bloque Nacionalista Galego en el 2008. Entonces escribí: «Es injusto que un gobierno de izquierdas decida que el jubilado de 2.200 euros de pensión tenga gratis el autobús al igual que el que no tiene pensión. Es injusto que viajen gratis los estudiantes de 16 a 18 años y tengan que pagar los menores. Es injusto que el parado no tenga esas prebendas?». De sabios es rectificar y de justos aplaudir que el Bloque haya visto la luz cinco años después y tras los sonoros fracasos electorales cosechados en municipales y autonómicas en la ciudad de Ourense.

La Universidad «Esto es una cuestión de supervivencia económica porque en las condiciones actuales, con los últimos recortes, no llegamos a fin de mes», afirmó Carlos Lodeiro miembro del equipo de investigación Bioscope que abandonó el Campus de Ourense para irse a la Universidad de Lisboa. Lo hacen porque en Portugal (¡país intervenido y en recesión!) les ofrecen «estabilidad, plazas fijas y posibilidad de crecer». ¡Hasta Portugal nos lleva a los cerebros! Habrá que volver a tararear aquello de Fuxan os Ventos: «Iste vaise e aquel vaise // e todos, todos se van; Galicia sen homes quedas // que te poidan traballar». Así queda el campus sin liderazgo y sin futuro. ¡Y con Vigo dejando en mínimos para el 2013 la inversión en Ourense! ¡Una vergüenza!

La frase «O Concello de Ourense fai un alarde de transparencia excepcional», ha dicho la edila de Urbanismo, Áurea Soto, 24 horas después de saberse que el Concello había liquidado la práctica habitual de publicar en su página web (que es de todos) las actas de lo tratado en las juntas de área (que nos atañe a todos). ¿Qué prácticas arteras harán para ocultar los acuerdos que toman en base a la representación democrática que ostentan? La transparencia no se construye con frases sino con realidades. El que nada tiene que esconder, nada tiene que temer. Lo otro, el ocultismo, es sembrar de suspicacias la gestión pública.