Ciclo negro para la economía de las entidades locales

Miguel Ascón Belver
miguel ascón OURENSE / LA VOZ

OURENSE

La Diputación y decenas de concellos tuvieron que aplicar drásticos recortes

13 may 2012 . Actualizado a las 06:00 h.

Hace tiempo que la financiación pública está en crisis, pero si hay una administración que ha sufrido más que el resto durante los últimos meses, esa es la local. Las aportaciones del Estado y de la Xunta se han reducido notablemente y, además, decenas de ayuntamientos se han acogido al real decreto del 24 de febrero por el que el Gobierno central regula el pago de las deudas a proveedores de las entidades locales. El problema es que, a cambio de conseguir financiación para pagar las facturas atrasadas, los concellos han tenido que aprobar planes de ajuste para reducir sus gastos e incrementar sus ingresos, lo que se ha traducido en drásticos recortes y subidas de impuestos.

Lo mismo ha tenido que hacer la Diputación, que inició el mandato 2011-2015 con José Luis Baltar como presidente antes de que este diera el relevo en el cargo a su hijo, José Manuel, el pasado mes de febrero. Fue él quien tuvo que aprobar el plan de ajuste de la entidad, que incluye una moderación de gastos en el capítulo de personal -que consume actualmente el 41 % de sus fondos-, el cierre de los más de ochenta telecentros que llevaban Internet al rural ourensano, subidas de entre un 10 y un 20 % en los precios públicos del Pazo dos Deportes Paco Paz y un recorte en sus subvenciones nominativas -aquellas que se conceden bajo criterio exclusivo del gobierno provincial- en los mismos porcentajes.

Sobrecoste

Todo ello, teniendo en cuenta que el documento no contaba con dos imprevistos que ahondan en la crítica situación económica de la Diputación ourensana. Por un lado, los presupuestos del Estado reducen a cero las aportaciones del Gobierno central a los planes provinciales de obras.

En lugar de paralizar ese proyecto -que incluye pequeñas actuaciones en todos los concellos ourensanos a excepción del de la capital- el gobierno de Baltar decidió asumirlo en solitario, lo que supondrá un sobrecoste para las arcas provinciales de 1,2 millones. Además, un decreto de la Xunta encomienda a las diputaciones la gestión de los servicios sociales de los concellos con menos de 20.000 habitantes, lo que supondría un coste para la ourensana de 1,4 millones. Sin embargo, Baltar aseguró, tras reunirse este miércoles con Feijoo, que la Xunta aportará 1,2 millones.

Pese a todo, la noticia más llamativa que en estos doce meses de legislatura han protagonizado las entidades locales ourensanas la han aportado dos concellos de A Limia.

En sus planes de ajuste, tanto Xinzo como Os Blancos preveían un expediente de regulación de empleo, en el primero de los casos total y en el segundo, parcial. El alcalde de la capital de A Limia está negociando actualmente alternativas con los sindicatos y antes del día 15 de junio habrá una solución. En el Concello de Os Blancos, tras el rechazo conocido ayer del Gobierno central ha su plan de ajuste, el futuro es más incierta aún.

88 millones

Deuda de concellos

Según datos de deuda viva del Gobierno central.

50,8 millones

Deuda provincial

Pese a todo, la entidad la ha reducido en los últimos años.

3,7 millones

Facturas a pagar de la Diputación

El plan de ajuste recoge esa suma.