La elección de los senadores es más flexible y da más libertad a los votantes para elegir a sus representantes. El orden en el que los partidos sitúan a sus candidatos no siempre coincide con el que desean los ciudadanos. Así ha ocurrido el 20-N en la provincia de Ourense. En decenas de municipios los electores castigaron a los cabezas de lista de PP y PSOE. Uno de los casos más llamativos es el de Alva Dorado, número dos de la candidatura socialista, que superó a Miguel Fidalgo, número uno, en nueve concellos, la mayor parte precisamente de la comarca del cabeza de lista. Se trata de A Arnoia, O Carballiño, Leiro, A Mezquita, Laza, Pontedeva, Verea, Vilamartín de Valdeorras y Xunqueira de Espadañedo. El número tres del PSOE, Miguel Solla, superó, además, a Fidalgo en su municipio, A Teixeira, y en el vecino de Chandrexa.
También destaca el caso de Francisco José Fernández que, a pesar de ser número tres del PP, fue el más votado de los candidatos populares en ocho concellos -A Arnoia, Cenlle, Cortegada, Entrimo, A Gudiña, Leiro, Melón, A Mezquita-, empató con la número uno (Carmen Leyte) en Beade y fue segundo en otros 14 concellos: Boborás, A Bola, Castrelo do Val, Muíños, Nogueira de Ramuín, Petín, Piñor, Trives, Porqueira, A Rúa, Vilamartín de Valdeorras, Vilardevós y Xunqueira de Ambía. Leyte también fue superada por el número dos de la lista popular (Miguel Ángel Pérez de Juan) en siete ayuntamientos.