El colegio profesional cuenta con una póliza de seguros para estos incidentes
24 mar 2011 . Actualizado a las 06:00 h.Asistencia jurídica
El Colegio de Médicos de Ourense tiene constancia de que, durante el 2010, seis facultativos presentaron denuncias tras ser agredidos en sus puestos de trabajo. Los datos forman parte de un estudio realizado a nivel nacional por la Organización Médica Colegial. En él, Ourense figura entre las diez provincias españolas en las que se registran más casos.
Según apunta el secretario del colegio, José Manuel Bendaña, la estadística es útil porque supone empezar a poner cifras a un fenómeno que no siempre trasciende. Eso sí, asegura que no refleja con exactitud la realidad ya que las denuncias todavía no son la reacción mayoritaria. «No se conoce más que un pequeño porcentaje de los casos. Que Ourense salga como una de las provincias más destacadas es una distorsión. Significa que hay muchos sitios en los que no se denuncia. Esperamos que en próximas ocasiones el estudio sea más realista? aunque sea triste», detalla.
A tener constancia del problema ayuda, en el caso del Colegio de Médicos, contar desde hace años con una póliza de seguros específica para el profesional agredido. Con ella se le asiste jurídicamente (algo que en todo caso haría el organismo) y el facultativo tiene derecho a una pequeña indemnización. «Así captamos algunos casos que se nos escaparían», determina el secretario, que también apunta las razones por las que no se denuncia. Señala fundamentalmente a la baja autoestima que generan estas situaciones. Pero también está el miedo a que se cumplan las amenazas. Por último, embarcarse en un litigio hace que la agresión esté presente más tiempo: «Se tiene la sensación de que denunciando se van a tener más complicaciones que mirando hacia otro lado».
Por último, desde el colegio lanzaban ayer, coincidiendo con el Día Nacional contra las Agresiones en el Ámbito Sanitario, un doble mensaje: el médico debe saber que tendrá respaldo cuando denuncie y la sociedad tiene que asumir estos casos como un problema serio y no como una banalidad.