El Ministerio de Fomento dio ayer un paso más para hacer realidad la futura A-65, la autovía que conectará las capitales de Lugo y Ourense. El Boletín Oficial del Estado publicó ayer la aprobación provisional del tramo que va desde San Martiño hasta el enlace del nuevo vial de alta capacidad con la localidad de Cambeo. El Gobierno prevé una inversión de 73 millones de euros para ejecutar esta infraestructura.
Este tramo contará con dos enlaces. El primero de ellos estará en Vilamarín y conectará la A-56 con la Nacional 540, la carretera de Lugo a Ourense. El segundo será en Cambeo y enlazará la nueva autovía con la Nacional 525 -la carretera de Ourense a Santiago- en las inmediaciones de la intersección de este vial con la N-540.
El tramo aprobado ahora provisionalmente por el Ministerio de Fomento discurre por los términos municipales de Coles y Vilamarín y tiene una longitud de 9,2 kilómetros. La infraestructura, según ha informado el departamento gubernamental, estará compuesta por dos calzadas de siete metros de anchura, en las que se alojarán dos carriles de circulación de tres metros y medio con arcenes exteriores de 2,5 metros e interiores de 1 o 1,5 metros.
Los alcaldes de los dos municipios afectados por este tramo coincidieron a la hora de reclamar la máxima celeridad a la hora de poner en marcha la autovía. El regidor de Coles, el socialista Manuel Rodríguez Vázquez, destacó la importancia de esta infraestructura para liberar de tráfico la actual intersección entre las Nacionales 525 y 540, que es muy peligrosa.
De acuerdo con el trazado
Mientras, el alcalde de Vilamarín, Amador Vázquez, del Partido Popular, dijo tener «pouca fe» en que la infraestructura vaya a ejecutarse, al menos en los plazos anunciados por Fomento. «Espero que non sexa papel mollado porque se fala moito de boletíns, pero non se fai nada», lamentó. Tanto él como el regidor municipal de Coles consideran correcto el trazado previsto por el Ministerio para el tramo entre Cambeo y San Martiño. «Sobre iso non hai ningunha controversia», dijo Vázquez. «Salvo algunhas puntualizacións, está ben», concluyó, por su parte, Rodríguez.