Cientos de padroneses exigen que los fondos de la Fundación Cela se queden en la villa

E. Á. / M. CH. SANTIAGO/LA VOZ.

OURENSE

01 jul 2010 . Actualizado a las 02:00 h.

Cientos de padroneses volvieron a salir a la calle para exigir a la Xunta que los fondos de la Fundación Cela se queden en Iria Flavia y no sean trasladados a la Cidade de Cultura como pretende el Gobierno de Núñez Feijoo. A los habitantes del concello de Padrón no les vale ni una sola de las excusas aportadas por la Administración, y reclaman que se respete el deseo del nobel, que era que su legado se quedase preferentemente en Padrón. Con un apoyo unánime de los cinco partidos con representación en el gobierno local, el regidor, Camilo Forján, recordaba que el único motivo que está detrás del traslado es tener algo con que llenar la biblioteca del Gaiás.

«É o principio e o final, o que pretenden levar é o que ten valor. Aquí quedan as botellas, as bacinillas e as pinturas. Todas as cartas, manuscritos e cadernos queren levalas», afirmaba el regidor padronés, quien recuerda que la corporación municipal en pleno, las asociaciones de empresarios y comerciantes, y figuras públicas como el alcalde de Rianxo, Pedro Piñeiro o el periodista Pepe Domingo Castaño apoyan esta reivindicación. Por el momento se han reunido 3.000 firmas en contra del traslado. El regidor mostró también su indignación en relación con las declaraciones de que el traslado será temporal, «si, pero cunha temporalidade de 62 anos, iso non é nin un ano nin dous».

La marcha comenzó en el casco histórico de Padrón para terminar delante de la fundación en Iria, donde el alcalde leyó un comunicado. Durante la protesta las pandereteras animaron el camino con unas estrofas compuestas a propósito de la ocasión, y en las que ni la entonces presidenta, Marina Castaño, ni los responsables de la Xunta salieron indemnes. «Camilo lará Camilo, Marina déixate marchar, a Xunta quérete levar, e nós querémoste aquí, cando fuches para o outro mundo, ben dixeches que querías, entre outras a túa obra, tiña que quedar na vila».

Pese al ambiente festivo de la manifestación, muchos de los que participaron en ella ven de forma pesimista el futuro de la Fundación Cela. «Penso que se a presión é forte debería servir de algo, pero non me fío nada porque a Cidade da Cultura non ten qué meter dentro, e para encher ese baleiro hai que buscar algo», comentaba una profesora padronesa, que siempre lleva a sus alumnos a ver esta fundación, pese a que las visitas que recibe anualmente son muchas menos de las deseadas.

Pésima gestión

Y es que otro de los comentarios recurrentes durante la marcha fue la pésima gestión realizada, con un antiguo gerente «que despediu a xente e tivo que readmitila», y con una política de puertas abiertas más bien residual.

De hecho, el alcalde de Padrón reclama que se dejen los fondos en Iria, que la fundación se convierta en pública y que se abra a los ciudadanos. «No proxecto de humanización do concello a Fundación Cela era de feito unha das pedras angulares».