José Manuel Baltar Blanco ha lanzado numerosas propuestas organizativas en su campaña para suceder a su padre en la presidencia del PP ourensano. La última ha sido la creación de un carné específico para los afiliados del partido en Ourense. Esta iniciativa ha tenido diversas acogidas en entre los cargos más representativos de la provincia, aunque la mayor parte de los consultados ayer por La Voz la consideran inútil.
El más vehemente en su rechazo a esta propuesta ha sido Rogelio Martínez, delegado territorial de la Xunta en Ourense. «Hai un carné do PP que é suficiente. Non hai que andar diferenciando. Isto é un ourensanismo mal entendido, aldeanismo o chamaría eu», dijo ayer el ex alcalde de A Arnoia, que ironizó con la posibilidad de que él también repartiese carnés especiales para los afiliados del municipio en el que fue regidor.
De Martínez se ha dicho que es partidario de la candidatura de Jiménez Morán, pero otros responsables del partido en Ourense que han estado en actos de apoyo a Baltar Blanco tampoco ven necesaria una identificación específica para los afiliados ourensanos. Es el caso de Isaac Vila, alcalde de Xinzo, que a pesar de desconocer la propuesta en el momento de ser consultado decía que «hai un só PP». El regidor apostaba por «un carné único do PP de toda España». En la misma línea se manifestó el alcalde de Celanova, Antonio Mouriño, también presente en actos convocados por Baltar Blanco: «A min váleme con un carné. Ó final estamos encadrados todos no partido a nivel rexional e nacional».
El presidente de la junta local del PP de la capital, al que José Manuel Baltar acusó de hacer campaña en favor de su adversario, se manifestaba en similares términos a sus compañeros. «A min chégame co carné que teño do PP, que me identifica como do PP de Ourense, de Galicia, e de España. Por encima de todo está o partido», dijo.
Más favorables a la propuesta se mostraron, por ejemplo, desde Valdeorras. El responsable comarcal del partido y portavoz en A Rúa, Avelino García Ferradal, decía que «es una forma de hacer provincia» pero reconocía que no veía «supernecesaria» esa identificación especial. Por su parte Moisés Blanco, vicepresidente segundo de la Diputación, veía la iniciativa como positiva para dotar a los afiliados de un carné sin tener que esperar por el oficial, que tarda más tiempo en llegar. «Es un estímulo para los militantes», dijo.
De la misma opinión es, por ejemplo, la diputada Ana Belén Vázquez, que no ve motivos para que la iniciativa se considere como una afrenta al partido a nivel nacional o regional. «El carné tarda cinco o seis años y es una buena idea para que el afiliado sienta la pertenencia al partido», reflexionaba ayer. Si el objetivo de esa identificación ourensana es ese, incluso el portavoz del PP de Galicia, el alaricano Antonio Rodríguez Miranda, estaría a favor de la iniciativa. «Como medida transitoria non lle vexo maior importancia pero agora que se fala tanto de ourensanismo quen fai a proposta é quen ten que dicir a transcendencia que lle quere dar», dijo el también diputado autonómico. La senadora y alcaldesa de Cartelle Carmen Leyte también restaba importancia a la iniciativa y negaba que supusiera un enfrentamiento con Santiago y Madrid. «Non lle vexo maior problema», decía ayer.
El vicepresidente primero de la Diputación y secretario del comité organizador del cónclave, Plácido Álvarez, afirmaba, por su parte, no estar ni a favor ni en contra: «Xa temos un carné do PP de Galicia e si temos un do PP de Ourense tampouco pasa nada pero eu creo máis nos feitos que nos formalismos».