Lotina juega al escondite con Jiménez

Rubén Ventureira

OURENSE

El Sevilla dio descanso total o parcial frente al Barça a cinco jugadores que hoy se perfilan como titulares

20 ene 2010 . Actualizado a las 02:00 h.

Lotina le ha cogido gusto a las probetas. El laboratorio de Abegondo, hasta ahora centrado en sacarle partido goleador al balón parado, trabaja intensamente en los últimos días para dar con la fórmula táctica adecuada. El frenesí experimental lo ha provocado la ausencia de un elemento clave: Guardado. La pasada temporada, el técnico cambió el esquema cuando el mexicano le faltó. En la actual, aún no lo ha tocado, pero sí ha experimentado: adelantó a sendos laterales al mediocampo contra el Valencia en Copa (Filipe) y frente al Mallorca en Liga (Laure). Ayer, en Abegondo, Lotina recuperó una fórmula añeja que, de aplicarse hoy en la ida de los cuartos de la Copa contra el Sevilla, sí supondría un cambio de dibujo: se trata de la defensa de cinco, aquella receta de la abuela que resucitó al Deportivo hace un par de años.

No confirmó ayer Lotina si ya hoy extraerá de la chistera el 5-4-1 que estrenó con éxito frente al Valladolid el 27 de enero del 2008 (el próximo miércoles se cumplirán dos años). Entonces, con el Dépor a cinco puntos de la salvación, el equipo obtuvo un triunfo vigorizante. Y ahí comenzó una remontada que lo sacó del pozo y lo elevó hasta la Intertoto.

Último experimento fallido

El último recuerdo del 5-4-1 data de la temporada pasada, de la primera ronda de la UEFA contra el Brann (18 de septiembre del 2008). Entonces alineó a Laure, Lopo, Colotto, Piscu y Guardado, y la cosa acabó mal: 2-0 para los noruegos. Hoy volverá a realizar probaturas en el entrenamiento a puerta «cerrada, cerrada» (así lo remarcó el técnico) en Riazor. Juega el escondite con el Sevilla y, por extensión, con la prensa.

Frente al Athletic, el sábado, no estará Juan Rodríguez por sanción. Los leones son un equipo de gran poderío aéreo, y por ello la ausencia del malagueño duele mucho más. Para solucionar el problema de altura, no sorprendería que contra el Athletic recurriese al sistema de los tres centrales. La duda está en si lo aplicará antes contra el Sevilla. «Que lo hayamos probado [el 5-4-1] no significa que vayamos a jugar así fijo mañana [por hoy]. Puede ser para el sábado», fue la máxima pista que dio en torno al sistema. Sobre el once, avanzó que haría cuatro cambios respecto a Mallorca, y que dos de ellos serían Zé Castro y Piscu. Se supone que no incluyó al portero en esas cuatro variaciones, y que los que podrían entrar serían Iván Pérez y Bodipo.

Jiménez va a por la Copa

Así que sí es coherente con lo probado, la defensa de cinco la formarían Manu, Manuel Pablo o Laure, Piscu, Lopo, Colotto y Filipe. En el pivote actuarían Juca y Antonio Tomás, si bien también probó a Juan Domínguez en lugar de los dos. La banda derecha sería para Juan Rodríguez y la izquierda para Iván. Arriba jugaría Bodipo, al que después relevaría por Adrián.

Si juega con cuatro atrás, las combinaciones son variadas, como ha demostrado a lo largo de los dos últimos choques.

Jiménez sí ha mostrado sus cartas: va a por la Copa y ya sabe con quién. El sábado en el Camp Nou dio descanso total a tres jugadores (Romaric, Renato y Negredo) y parcial a otros tantos (Adriano, Duscher y Capel salieron en la segunda mitad). Tenía pensado alinear hoy a los seis, pero Adriano se lesionó ayer a última hora y su lugar lo ocupará Navarro.

Jugará con defensa de cuatro, con Romaric y Duscher por delante, Capel y Navas como extremos, Renato de enganche y Negredo arriba. La pasada temporada, el técnico hispalense llegó cuestionado al triple enfrentamiento con el Dépor. Ganó los dos partidos de Copa y el de Liga. Salió muy reforzado. Ahora lleva cuatro derrotas seguidas en Liga... pero entremedias ha eliminado de la Copa al todopoderoso Barcelona.