Varios centros de salud de la provincia de Ourense han sufrido los efectos colaterales de la nevada que ayer sorprendió a los ourensanos. En Baltar, Toén, Xunqueira de Espadanedo, Lobeira y Chandrexa de Queixa las malas condiciones de las carreteras impidieron la llegada a tiempo de los médicos por lo que las consultas tuvieron que ser suspendidas o aplazadas.
En Celanova el afectado fue el servicio de pediatría al retrasarse la llegada de la especialista desde su domicilio. En todos los casos los médicos tuvieron dificultades para llegar a su destino, sin que se registrasen mayores incidencias; un acto administrativo de recepción de las obras del nuevo centro de salud de Toén también tuvo que ser suspendido por las dificultades de acceso al lugar.
En Piñor
En el hospital de Piñor, a escasos kilómetros del centro de la ciudad, se notó la ausencia de aproximadamente el 30% de los pacientes que acuden al servicio de rehabilitación.
Los problemas sufridos por algunas ambulancias encargadas de su traslado impidieron su llegada a la consulta médica. Así, la ambulancia adscrita al Complexo Hospitalario de Ourense para los traslados entre los hospitales de la capital y el de Piñor trabajó toda la mañana, sin embargo, sin ningún incidente pese a las malas condiciones de la carretera que une estos dos puntos sanitarios.