Agosto disparó la cifras de incendiarios presos con carácter preventivo

P. Seoane OURENSE

OURENSE

De las veinte personas imputadas de enero hasta julio, sólo uno de ellos acabó en Pereiro De los cinco detenidos de la quincena, una mujer está hospitalizada y cuatro, recluidos

18 ago 2006 . Actualizado a las 07:00 h.

?a relación entre incendios, detenciones y prisión preventiva, resulta muy peculiar en la provincia de Ourense. Será casualidad, o la alarma social que este mes ha generado la oleada de incendios forestales padecida por Galicia, pero en agosto se dispara la proporción de encarcelados sobre los sospechosos identificados o relacionados con fuegos por parte de las fuerzas de seguridad. El detalle de los asuntos judiciales de este año por incendios, en los que figuran presuntos autores y responsables de las distintas negligencias o imprudencias que dieron lugar a los incendios, muestra que sólo en un caso, en el mes de abril, acabó en prisión el implicado. El protagonismo del período primaveral le correspondió en exclusiva a Jorge Magallais, de 26 años. Fue detenido por efectivos de la Guardia Civil, del Servicio de protección de la naturaleza del destacamento (Seprona) de Lobios; pasó a disposición del Juzgado de Bande el 4 de abril, ese mismo día ingresó en prisión y después de diecisiete jornadas de reclusión preventiva, recuperó la libertad. Atrás dejaba un procedimiento judicial por un incendio en un monte entre Muíños y Calvos de Randín, que arrasó dos hectáreas y media de monte arbolado, junto con otra hectárea y media de raso, de acuerdo con las cifras provisionales incluidas en el atestado. El contraste es muy significativo. De la veintena de personas que aparecen identificadas con nombre y apellidos en los distintos atestados e informes policiales del año, cuatro de la Policía Autonómica y los demás de la Guardia Civil, sólo uno de los arrestados en los siete primeros meses ha pasado por prisión, mientras que de los cinco detenidos del mes de agosto, cuatro se encuentran en la cárcel y la quinta persona permanece en la zona reservada a presos dentro del hospital Santa María Nai, por orden judicial y al cuidado de la unidad de agudos psiquiátricos. Guardia Civil En los 86 procedimientos judiciales abiertos desde enero hasta el 31 de julio a partir de otros tantos atestados de la Guardia Civil aparecen identificadas un total de dieciséis personas. Son quienes ilustran con sus nombres y apellidos una lista no precisamente agradecida, al margen de que alguno de ellos, muchos o pocos, acabe judicialmente exonerado de responsabilidad penal. Llama la atención, de todos modos, que el castigo que objetivamente representa pasar dos o tres semanas de privación de libertad, en situación de prisión provisional, se haya reservado de forma mayoritaria a los casos que se han producido en agosto, coincidiendo con la crisis de esta primera quincena en el conjunto de Galicia. Con la referencia de los procedimientos judiciales abiertos en los juzgados de la provincia, a partir de los atestados de la Guardia Civil desde primeros de año hasta finales de julio, sobre un total de 86 diligencias en los siete meses, son dieciséis las personas identificadas. Sólo en julio se alcanzó la cifra de 36, mientras que, en el resto del año, enero se cerró sin intervenciones; febrero, con quince; marzo, con dos; abril, con once; mayo, con once, y junio, con doce. La negligencia es la razón que más repite entre las causas que se atribuyen al origen de los distintos sucesos. La relación de los casos que han llegado a los juzgados de la provincia se abre en febrero con la imputación de los presuntos responsables de un incendio en Porto Insua, de Bande, y otro fuego, en el entorno de Bandeira, de Gomesende. Ambos tienen la consideración formal de detenidos, en el primer caso por imprudencia y el segundo por negligencia. Las llamas arrasaron extensiones de tres y seis hectáreas, respectivamente. Accidentes y cohetes Al mes de abril corresponde la identificación de otras cinco personas. En todos los casos, los sucesos se atribuye a negligencias. Con Jorge Magallais, el único detenido que ha pasado por prisión en los siete primeros meses del año, también aparecen presuntos responsables de fuegos en Aguillón, de Lobios; en Casares, de Nogueira de Ramuín; en Mondoia, de Trives, y en Outeiro, de Bande. El mes de mayo deja cuatro nombres más, tres de ellos por dos fuegos en Vilamarín y el cuarto, en calidad de propietario de un tractor agrícola que sufrió un accidente y dio pie a un incendio en el concello de Calvos de Randín, de acuerdo con las investigaciones de la Guardia Civil. El detalle de junio suma otros tres nombres, por diferentes incendios. Uno, por negligencia, en As Seixas, de Ourense; otro, en O Palomar, de Monterrei, atribuido al cohete que lanzó un vecino, con un tercero que se imputa a la propietaria de una máquina que se incendió y ocasionó otro incendio en Labaceiras, en Petín. Los presuntos implicados de julio son dos. Corresponden a una negligencia en As Tortas, de Bande, y a un fuego intencionado en As Raposeiras de Xunqueira de Ambía.