El Gobierno reconoce el retraso del saneamiento de la capital

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Medio Ambiente asume que no se licitará hasta final de año Las obras de recogida y tratamiento de los residuos de A Ponte se prometieron hace ya dos años

11 jul 2006 . Actualizado a las 07:00 h.

?a Confederación Hidrográfica, organismo que depende del Ministerio de Medio Ambiente, ha rectificado de nuevo las fechas anunciadas con anterioridad para desarrollar la segunda fase del plan de saneamiento de la capital. Las aguas residuales del centro de la capital vierten al Miño después de un proceso de tratamiento incluido en la primera fase del plan, concluido en la primavera del 2005. Sin embargo, los residuos que se generan en la margen derecha discurren por unos colectores muy antiguos, insuficientes para atender a la población de A Ponte, de unos 35.000 habitantes. El presidente de la Confederación, Jorge Marquínez reconoció ayer mismo que esta segunda fase del plan sufre un retraso ya que la licitación de las obras no está hecha. El directivo del organismo de cuenca confía en que el trámite administrativo se pueda desarrollar antes de final de año. Marquínez informó que «el proyecto lleva retraso con respecto a las previsiones iniciales ya que pensábamos licitarlo en el primer trimestre del año y se hará previsiblemente en el tercero». En febrero del pasado año, la ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona prometió que la licitación se haría con toda seguridad antes de que concluyese el 2005. La misma fecha fue dada por el conselleiro de Medio Ambiente, Manuel Vázquez. Ahora, el presidente de la Confederación Hidrográfica vuelve a barajar otras fechas para prometer que se hará antes de que concluye este ejercicio. Financiación Marquínez aludió a las dificultades económicas para conseguir financiar el proyecto. De hecho, reconoció que las obras «se iban a hacer con unos fondos y ahora se hará con otros». Además, el procedimiento administrativo pasa ahora de la Confederación Hidrográfica a la Dirección General de Aguas, si bien sigue manteniéndose el propósito de llevar adelante estas obras. Marquínez tildó de «buena noticia» el hecho de que la construcción de los colectores desde A Ponte hasta Eirasvedras, cifrado en unos veinte millones de euros, va a ser asumida íntegramente por el Gobierno central y no repartido entre el Ministerio de Medio Ambiente y la Xunta. Captaciones Por otra parte, el presidente de la Confederación afirmó que vigilaría la captación de agua que se realiza en la capital para dar servicio a la población. Sostiene que se está haciendo un aprovechamiento mayor del permitido, lo que le deja «perplejo». Insta al Concello de Ourense a que se atenga a la concesión que tiene otorgada y anunció que el organismo que preside «tomará las medidas oportunas para que se cumpla la legalidad».