Los alcaldes aprobaron en pleno la disolución de la Mancomunidad de A Limia
OURENSE
Los integrantes del pleno de la Mancomunidad de A Limia aprobaron ayer la disolución de esta entidad supramunicipal así como la revisión de los acuerdos del convenio colectivo. Los conflictos laborales de los últimos seis años y las demoras de pago de los concellos han decidido a los alcaldes a deshacerse de la mancomunidad. Estuvieron todos a favor excepto la representación de Xinzo, que se abstuvo. La Mancomunidad de A Limia viene realizando los servicios de recaudación de impuestos, recogida de basura, maquinaria desbrozadora, servicios sociales y turismo. Los ayuntamientos están dispuestos a hacer todo esto por su cuenta. Los primeros en querer irse fueron los de Sarreaus, Sandiás, Rairiz de Veiga y Calvos de Randín. Al decidirse la disolución, el presidente y alcalde de Os Blancos, José Juan Puga Quintas, presentó su dimisión como tal presidente. Ahora quedan dos meses para llevar a cabo la liquidación pero no hay una fecha límte, dijo Puga. Esta mancomunidad tiene 21 trabajadores que ahora pasarán a repartirse por los ayuntamientos. La Mancomunidad de A Limia tiene 17 años. «Nun principio era operativa pero tiña un exceso de plantilla e cos soldos incrementados comezou o problema posto que o aumento de nóminas faina inoperativa», explicó el hasta ayer presidente. La CIG mostrará la postura de los trabajadores pasado mañana, tras la decisión del pleno de ayer.