El incendiario encarcelado cumplió en Pereiro más de un año por robos

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El implicado prestaba servicios como capataz en la brigada de extinción de Celanova Se trata del primer detenido del año que acaba en prisión preventiva por un incendio forestal

22 ago 2005 . Actualizado a las 07:00 h.

El capataz de la brigada municipal de extinción de incendios forestales de Celanova, Emilio C.M., de 33 años, detenido por la Policía Autonómica y encarcelado el fin de semana por su presunta relación con distintos incendios forestales en Rairiz de Veiga, ya conocía el centro penitenciario de Pereiro por anteriores estancias. Ésta es la quinta vez que ingresa en la cárcel, de donde salió en libertad condicional en octubre del año 2001 después de haber permanecido un año y tres meses recluido por robo, cumpliendo condenas de los juzgados de lo Penal de Ourense. Los desencuentros con la Justicia y con las fuerzas de seguridad del ahora encarcelado, en prisión incondicional y sin fianza por su presunta relación con los incendios forestales en Rairiz de Veiga, comenzaron en el año 1994. Desde entonces y hasta que en el año 2000, ya condenado, ingresó de forma definitiva para cumplir condena, pasó por el centro penitenciario ourensano en otras dos ocasiones, en los años 1997 y 1999. Policía Autonómica La detención de este trabajador de las brigadas de extinción de incendios es consecuencia de un trabajo de seguimiento por parte de la Policía Autonómica, que lo apresó, según fuentes del propio cuerpo, cuando prendía fuego en campo abierto. Las sospechas policiales lo vinculan con otros quince fuegos, todos en el mismo término municipal de Rairiz de Veiga, de donde es natural. La acción incendiaria del detenido tendría su origen, según medios policiales, en un supuesto afán de venganza, al no haber logrado el empleo en la brigada de este municipio. Primer encarcelado La detención de Emilio C.M. es la primera de cuantas han realizado en Ourense las fuerzas de seguridad (mayoritariamente, la Guardia Civil) que este año ha dado lugar al ingreso en prisión del implicado. El resto de los casos del año corresponde, en la práctica totalidad de los casos, a situaciones de presuntas imprudencias, que dieron lugar a incendios forestales.