La provincia ourensana registró 68 movimientos sísmicos en un año

Jesús Manuel García OURENSE

OURENSE

El más fuerte alcanzó 3,4 grados Ritcher en Boborás, seguido del de A Peroxa, de 3 grados La Terra de Celanova es una de las comarcas más sensibles a los temblores

06 ene 2005 . Actualizado a las 06:00 h.

?urante la madrugada del pasado martes se registró en Triacastela, en Lugo, el primer movimiento sísmico del 2005 en Galicia. La provincia de Ourense no es ajena a este fenómeno de la naturaleza que, elevado a la máxima potencia, ha dejado miles de víctimas en el sureste asiático. El suelo de la provincia se mueve. Y sucede más a menudo de lo que se piensa, ya que la mayoría de las veces el temblor pasa desapercibido para los ciudadanos. Durante los últimos doce meses se registraron en Ourense 68 movimientos sísmicos de los cuales dos llegaron a tener la intensidad suficiente para ser percibidos por los vecinos. En el 2004 ha habido meses de seis temblores aunque el que más tuvo fue julio, con 19 terremotos. Los movimientos afectaron a 32 localidades repartidas por todo el territorio provincial aunque en alguna, como Boborás, el suelo se movió hasta diez veces. Las zonas más afectadas son precisamente el municipio de Boborás y la Terra de Celanova, especialmente Quintela de Leirado, Rabal y Outomuro, en Cartelle. Los más intensos Temblores de intensidad destacable sólo hubo dos. Uno el 25 de julio en Boborás, que se produjo a 16 kilómetros de profundidad y que fue de intensidad dos siendo su magnitud de 3,4 grados en la escala Ritcher. Tuvo tres réplicas ese día. El de mayor intensidad en el 2004 tuvo lugar el 24 de mayo en A Peroxa, a diez kilómetros de profundidad. Alcanzó una intensidad de tres a cuatro y 3 grados en la escala Ritcher. El temblor ocurrido a mayor profundidad fue el de Boborás, a 30 kilómetros, en julio, seguido de los de A Merca en abril, a 22 kilómetros, o el de Sobrado, en mayo, a 21 kilómetros bajo tierra. El último movimiento sísmico registrado en los archivos del Instituto Nacional de Sismología en Ourense es del pasado 21 de diciembre, en Celanova, con una magnitud de 1,6, prácticamente imperceptible. Cuando se habla de magnitud los sismólogos se refieren a la medida del tamaño de un terremoto, que no cambia con la distancia al epicentro. La más conocida es la magnitud local de Ritcher. La intensidad muestra la forma en que se ha sentido un seísmo y el grado de daño causado. Disminuye con la distancia al epicentro. En Europa la escala que mide la intensidad es la EMS, cuyos valores o grados se dan en números romanos del I al XII. En el mapa sismológico de la península Galicia es una zona de baja peligrosidad a pesar de que los temblores se repiten de forma constante. Al ser la mayor parte del suelo granítico (y más sensible) se produce una rápida transmisión de las ondas sísmicas. En Ourense existen dos estaciones sísmicas, una instalada en Lobios y la otra, en A Rúa. La primera es la más moderna, pues entró en servicio en febrero del 2001 y la valdeorresa, en mayo de 1987. La estación veterana de A Rúa, en As Pedreiras, es un centro analógico a 431 metros de altitud.