Dos grandes de Portugal y España

JERÓNIMO MARTEL

OURENSE

MIGUEL VILLAR

OURENSE CON EL ARTE | O |

24 may 2003 . Actualizado a las 07:00 h.

Pintura geométrica El pintor y antiguo arquitecto Nadir Afonso expone en la sala inferior del Centro Cultural de la Diputación, hasta el día 8 de junio. Se trata de una exposición antológica, compuesta por cincuenta cuadros de formato grande. Nacido en Codesçais (Chaves, Portugal), cuenta actualmente ochenta y tres años; y -pese a la artrosis de sus manos- no ha interrumpido su trabajo artístico. Se formó en la Escuela Superior de Bellas Artes de Oporto y la Escuela de Bellas Artes de París. Y ya a los 24 años pudo colgar una de sus obras en el Museo de Arte Contemporáneo de Lisboa, para luego a los 47 ganar el Premio Nacional de Pintura de su país, donde es asimismo miembro de la Academia Nacional de Bellas Artes. Esta exposición antológica y retrospectiva hasta el año 1950 ha estado reservada, tanto a nuestra ciudad, como a la portuguesa de Vila Nova de Cerveira -dentro de su XII Bienal 03 internacional de arte, que cumple sus bodas de plata-. Afonso trabajó como colaborador con los míticos arquitectos -y urbanistas- Le Corbusier y Niemeyer, respectivamente consejero y ejecutor de la planificación de Brasília. Y también con el pintor Fernando Léger -que derivó del cubismo a su propia fórmula, llamada tubismo-. Toda esa influencia está en el arranque de su propia originalidad pictórica, que él mismo ha explicado en diversos libros. Concretamente, Le Corbusier propuso en 1918 lo que llamó el Purismo, que pretendía superar el cubismo gracias al retorno de los modelos clásicos. Y, en fin, lo remontó en su obra -y de Ozenfant- Aprés le Cubisme, donde se inclinaba por las fórmulas geométricas simples y el constructivismo pasado por Cézanne, con el recurso a los elementos estructurales del espacio real -cubo, esfera, cilindro y cono-, entendidos como especialmente relevantes. En las obras de la muestra, se distinguen dos formulaciones de cuadros: la que presenta masas compactas de colores y la que se ciñe a un conjunto de trazos. Una, sin embargo -Aúrea purpúrea, una marina-, es una síntesis de ambos estilos. Escultura filosófica La sala superior del Centro Cultural de la Diputación alberga hasta el 15 de junio una exposición de parte de la obra del escultor vasco Chillida, bajo el título Eduardo Chillida: Vida e filosofía. Chillida y Oteiza, los dos grandes escultores vascos de todos los tiempos, recientemente fallecidos uno y otro -así como perpetuos competidores mutuos en términos de buena ley-, bien merecen una nueva y especial atención desde su muerte. Quizá esta exposición que ahora nos visita anime a muchos de sus visitantes a saltar desde ella a la página web del Museo Chillida-Leku, puesto que en la muestra presente no cabe el desarrollo de tanta obra de tan importante peso y volumen. Pero verdaderamente merece la pena. Constituye la primera exposición temporal celebrada en el citado museo desde su apertura. Y había sido pensada con motivo del IV Congreso internacional de Ontología, celebrado en San Sebastián bajo el patrocinio de la UNESCO.