El gallego que quiso la paz mundial

OPINIÓN

Hace unos días, el Instituto de Estudios Coruñeses José Cornide organizó unas jornadas dedicadas al mayor internacionalista español del siglo XX, y el más olvidado del siglo XXI. Salvador de Madariaga situó a España con una capacidad de influencia internacional que no volvió a tener. Llevó el nombre de A Coruña y de Galicia por las más altas esferas internacionales y europeas, pero A Coruña y Galicia apenas le recuerdan ya. Sin embargo, cuenta con un lugar privilegiado en la Universidad de Oxford, en el Colegio de Brujas o en la Unión Europea, donde tiene todo un edificio con su nombre. Fue un pionero de la integración europea y de la paz mundial.
La primera vez que los países crearon una organización internacional para lograr un mundo en paz, la Sociedad de Naciones, contaron con Salvador de Madariaga. Tal fue su autoridad que llegaron a calificarle como «la conciencia de la Sociedad de Naciones», por su defensa de los valores de paz y solidaridad frente a las posiciones extremistas e imperialistas crecientes en el período de entreguerras. Le encomendaron varios imposibles, como la misión de lograr el desarme de las naciones o la de mediar en algunos de los conflictos más cruentos de la época en varios continentes, como la guerra del Chaco en América, la de Abisinia en África o, por supuesto, la de Manchuria en Asia.
No en vano fue propuesto en varias ocasiones al Nobel de la Paz (y también el de Literatura). Nunca lo recibió, pero contribuyó a que lo recibiese el principal internacionalista argentino del siglo XX, Carlos Saavedra Lamas, apoyando su famoso pacto que prohibía la guerra en las relaciones internacionales. Esta posición era rompedora y vanguardista, pues la guerra era entonces un instrumento legal para resolver las controversias entre países. Saavedra Lamas fue, por ello, el primer hispanoamericano galardonado con un premio Nobel.
Salvador de Madariaga fue uno de los pioneros en la integración europea, en erradicar la guerra como forma de resolver las controversias entre países. Tal y como expusimos en las jornadas, un coruñés y gallego nacido en el Orzán sentó las bases de un orden internacional que rompía con la historia, y contribuyó a que Hispanoamérica lograse su primer Premio Nobel.
Este evento ha tenido el valor añadido de crear el Círculo Madariaga, integrado por miembros de varias universidades españolas, que trabajaremos en ensalzar su legado, tan necesario como siempre, o más necesario que nunca. ¿Les suenan Putin, Netanyahu o Trump? Hace un siglo, Salvador de Madariaga contribuyó a construir el orden internacional que hoy pretenden destruir.