Enséñale a pescar
No hay nada más agradable que una ciudad a las 7 de la mañana. Solo hay algo que llama poderosamente la atención: la cantidad de jóvenes que llenan cafeterías y terrazas en horario laboral. Son los «jóvenes jubilados». No se sabe muy bien desde cuándo y el por qué de esta nueva condición social. Es un asunto digno de estudio. Y muy preocupante, porque si se jubila a la juventud antes de fomentar su vida laboral, ¿se trata del mundo al revés, buscando trabajo a los 50? ¿Qué será de ellos cuando lleguen a los 60? Y sobre todo, ¿en dónde está su futuro cuando el presente de muchos jóvenes es el paro? Los viejos proverbios llevan razón: no le des peces, enséñale a pescar. M. J. Vilasuso. As Pontes.
Cuatro años en Vilarmaior
Ayer fue mi último día en Vilarmaior, un día al que nunca quise poner fecha en el calendario, pero que tarde o temprano llegaría.
Cuatro años maravillosos en los que pasé a formar parte de la vida de muchas personas y ellas de la mía... vivencias, anécdotas, risas y, por desgracia, también algunas lágrimas.
No puedo describir con palabras lo que sentí al trabajar aquí: sentirse apreciado, querido, respetado... eso no tiene precio. Nunca fui el mejor enfermero del mundo, pero las personas de Vilarmaior me hicieron sentir como si lo fuese.
Siempre seré vuestro practicante, ATS, enfermero. Os llevo en mi corazón. Javier Mosquera Campos. Vilarmaior.
Sánchez, amnistía e impostos
O presidente Sánchez conseguiu os apoios parlamentarios para ser presidente, e polo tanto non se aferra ao poder, senón que é o presidente lexítimo deste país, e, aínda que algún non lle guste, debe respectalo.
Se non está de acordo coa amnistía, respecte aos que si o estamos. E non hai subida salvaxe de impostos, que si había co PP, e ademais os impostos son necesarios para financiar os servizos públicos, pero supoño que algúns prefiren que se privaticen. Hai menos paro que cando gobernaba a dereita, e a mordaza de xuíces e fiscais faina a dereita política que bloquea a renovación do CGPJ, non Sánchez. E o Estado debe ser intervencionista para paliar as desigualdades, naturalmente. Xoán Francisco Pérez Argibay. Santiago.
Gracias, Jacobo
Quien escribe lo hace desde una delicada salud de hierro: en el año 2007 tuve un infarto cerebral del que me repuse con esfuerzo y mucha rehabilitación, con una pérdida de movilidad permanente en la mano izquierda. Durante el 2011 empecé a tener una inflamación de ganglios del cuello que me llevó a conocer al doctor Jacobo Chao, otorrino del CHUF, quien en la primera visita, después de meses de dudas y de visitar a muchos médicos, dedujo rápidamente mi diagnóstico de carcinoma de cavum. Desde ese día se convirtió en mi otorrino, controlando permanentemente mis progresos.
Han pasado más de doce años de contacto, visitas y revisiones, y las palabras jamás van a ser suficientes para mostrar el nivel de gratitud que siento, jamás olvidaré todo lo que has hecho por mí: por tu acierto en el diagnóstico y por los cuidados que fueron tan efectivos. En tu atención a mi patología y mis progresos fuiste un digno ejemplo de trabajo y profesionalidad por el bienestar de los pacientes, para los cuales, como en mi caso, resultan fundamentales apoyo, tranquilidad y confianza. Agustín Díaz Fernández. Cobas (Ferrol).