Responsabilidad de jueces y funcionarios
En La Voz del domingo 4 de junio leí una entrevista con la jueza de familia Natalia Velilla. Estoy plenamente de acuerdo con casi todo. No soy capaz de calibrar si los jueces están o no mal pagados, supongo que sí, como todos los españoles, exceptuando algunos políticos y funcionarios. Digo esto porque fui funcionario durante 42 años y, en ese tiempo, conocí y sufrí a funcionarios de todos los calibres, pero lo que nunca sucedió fue la expulsión de alguno por no hacer su trabajo. En esos casos se resolvía con un «hazlo tú, que ya sabes». Por eso digo que estoy de acuerdo con «casi todo».
La citada jueza dice: «Estamos muy mal pagados para la responsabilidad que asumimos». Esto sería verdad cuando cometes un error o no cumples con tu trabajo y recibes la sanción correspondiente. ¿Cuántos jueces conocemos sancionados con la expulsión? ¿Se acuerdan de una juez en Lugo que obligó a no sé cuántas personas a dejar su trabajo en aquel momento? Pues bien, esta jueza está en Ponferrada. Por eso no estoy de acuerdo con eso de «la responsabilidad». Cuando vea que a los funcionaros les aplican la ley empezaremos a hablar de responsabilidad. Andrés Rodríguez García. Ferrol.
El animal político lleva nombre de mujer
Ataca de nuevo. Esta vez, el 23 de julio. Al parecer, las elecciones del 28 de mayo caldearon el ambiente, y, ahora, unos preparan el gran salto al Gobierno de la nación, mientras este último intenta mantener el poder a toda costa. Sánchez lo tiene difícil. Y por eso se agarra, con todas sus fuerzas, al único cabo que le queda intacto, los otros están hechos trizas. Ella es su salvación. Y no solo Pedro lo sabe, también Feijoo ve en ella, en su paisana gallega, su perdición política. Últimamente, mal que les pese a los proetarras bilduitas, y a los catalanes golpistas, lo bueno parte de Galicia y recala en el resto de España. Una mujer gallega es la salvación. Es, mal que les pese a muchos, inteligente, fuerte y genuina, y con una ilimitada generosidad. Pienso —ya veré si acierto— que no habrá dique de contención para semejante ciclón, que acabará arrasando en las elecciones generales. Ella que, sin ser de los suyos, dará la victoria a los socialistas, merece ser compensada con algo más que promesas. A ella, el animal político más convincente, le lloverán los votos. Por eso, el sorpasso de Sánchez lleva nombre de mujer, y se llama Yolanda. Xiana del Cabo.
¡Ojo, Feijoo!
Pasan los días desde la nueva y urgentísima llamada a las urnas. Pero en la sede del PP en Génova sigo viendo el mismo cartel de 3 x 10 metros con una enorme cara de Ayuso y una sola palabra: «Presidenta». Ojo, Feijoo, para no ser, a tu peculiar manera, otro Casado. E. Novas Soler. Madrid.
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