Cuñados y cuñadas

Mariluz Ferreiro A MI BOLA

OPINIÓN

Juan Bernardo Fuentes Curbelo, Tito Berni, el presunto líder de la trama Mediador.
Juan Bernardo Fuentes Curbelo, Tito Berni, el presunto líder de la trama Mediador.

12 mar 2023 . Actualizado a las 05:00 h.

El cuñadismo ha estado siempre ahí. Como la atmósfera. Como el oxígeno. Puede que no se aprecie a simple vista, pero se respira. Otra cosa es que se le haya acabado poniendo un nombre (y, en bastantes casos, apellido). El caso Mediador, ese supuesto vergel cutre y lucrativo de prostíbulos, drogas, paparotas y cubatas, lo demuestra. Cuñadismo extremo. Con hechos y palabras. Unos individuos que cobraban por hacer la vista gorda con ciertas granjas y por agilizar ayudas públicas europeas. A las mordidas les llamaban «bocatas de calamares». Al exdiputado socialista clave en el engranaje lo bautizaron como el Tito Berni. A la amante despechada de uno de los implicados le adjudicaron el mote de «chocho volador». El tipo que no compartía la afición por los lupanares de sus compañeros era conocido como «el curilla». Y, en lugar de hablar de euros, en sus conversaciones, los amigos decían «bolígrafos». Miles de bolígrafos en comisiones. A ver si, con suerte, los pudieran acabar confundiendo con una red de envíos de material escolar a África. El asunto tendrá mayor o menor entidad económica, política y judicial. Pero lo indiscutible es que la trama y el estilo son dignos de Torrente. Rancios hasta el tuétano. Cuñados de libro en la forma y el fondo, las salsas peleonas de cualquier cena. La roña en el interior de esas uñas de colores que luce España. Todo ello muy feminista, por cierto. Muy apropiado para estos días de consignas y pancartas por la igualdad. La prueba evidente de que, mientras ciertas señoras en puestos de responsabilidad cultivan con pasión la huida hacia delante, las ideas peregrinas y el chascarrillo, el cuñadismo sigue mutando y conquistando el mundo.