Pablo a Yolanda: «Hay que ser estúpido»

César Casal González
César Casal CORAZONADAS

OPINIÓN

Oscar Vázquez

07 nov 2022 . Actualizado a las 18:17 h.

El cabreo se iba calentando. Pablo Iglesias ya dijo en abril de este año: «Si Yolanda Díaz cuenta con tanta proyección es porque hubo un núcleo, los más atacados, que en un momento determinado, contra el criterio de la progresía mediática, dijeron gobernar, gobernar y gobernar. Como resultado de eso, ahora existe Yolanda Díaz». Te queda claro, Yolanda. Pablo, te inventó.

Ayer fue todavía más duro: «¿Quién piensa que le puede ir bien en las elecciones generales a una candidatura de la izquierda si a Podemos le va mal en las municipales y autonómicas? Hay que ser estúpido», estalló el exvicepresidente.

Yolanda y Pablo, Pablo y Yolanda, son como el dúo Pimpinela y sus canciones. Antes se hartaron de declararse amor eterno, pero ya sabemos que las parejas sufren el desgaste del tiempo, sobre todo si son parejas políticas y lo que está en juego es el poder.

Pablo llegó a decir: «Yolanda Díaz es la mejor ministra de Trabajo de la historia de España». Y todavía demostraba mucho más amor por ella. La señaló con su dedo cesarista como su sucesora, como la primera mujer que podría ganar unas elecciones en España. Yolanda lo era todo para Pablo, sin sonrojarse, sin cortarse por los celos que podían sentir o mostrar Irene MonteroIone Belarra. Pero el empeño de Yolanda Díaz en pensar que puede volar sola ha ido enfadando a Pablo Iglesias, al que le encanta seguir mandando desde la sombra, tanto en Podemos como en todo lo que se mueva a la izquierda del PSOE. Por eso a Pablo sumar le parece restar. Y no le gustó nunca.

A Pablo Iglesias no lo quieren en las universidades, se ha quedado sin la segunda posibilidad de plaza, pero él es el más sabio y continúa dando lecciones. No le llamó directamente estúpida a Yolanda para que no lo crucificasen por machista leninista. Pero dio igual. El estúpido que pronunció iba por Yolanda Díaz y por los suyos, con ese amago de dejar a Podemos solos en la próxima campaña a las municipales y las autonómicas. Aviso a navegantes. O te fajas en la trinchera local, donde pinta muy mal, o te quedas fuera de liderar la izquierda en las generales. Tanto Pablo como Monedero se lo dijeron alto y claro en eso que llaman «uni de otoño»: Podemos es la que manda. Y todavía estamos a tiempo de borrarte, Yolanda, por muy bien que te valoren en las encuestas. Se olvidó Díaz de que el líder es el líder. Y después de él, la nada. Esté o no esté ya al mando de la organización que inventó.