A golpe de ocurrencia

Ernesto Sánchez Pombo
Ernesto S. Pombo EL REINO DE LA LLUVIA

OPINIÓN

FERNANDO VILLAR | EFE

01 oct 2022 . Actualizado a las 05:00 h.

La vida nos enseña que lo que se hace con precipitación y sin reflexión nunca sale bien. Y esta alocada carrera por rebajar la presión fiscal no va a ser una excepción. Nuestro sistema tributario, reformado a golpe de ocurrencia, seguirá incumpliendo el principio constitucional de justo, igual y progresivo. Pero es que, además, en todo este lío existen grandes lagunas que nadie tiene a bien explicarnos. Para que los que lo padecemos sepamos a qué atenernos. Se afanan en decir que su propuesta es mejor que la del adversario, que son más solidarios que nadie y que nuestras vidas mejorarán sensiblemente. Nada más.

No es necesario que nos cuenten que la decisión responde a necesidades electorales. La determinación no la toman ellos, sino las encuestas. Que son las que lo deciden todo. Mucho más cuando vamos a entrar en un año electoral y unos ven que pueden perder el asiento y otros se creen cerca de ocuparlo. Y eso los lleva a elaborar un catálogo de rebajas que para sí quisieran los grandes almacenes.

Quienes dedican sus vidas a estudiar la fiscalidad aseguran que el principio de validez universal sobre impuestos se basa en manejarlos con responsabilidad y seriedad. Y que deben ser estables, claros, sencillos, generales y bien explicados. Es ahí donde llegan las lagunas.

Porque nadie nos ha aclarado, después de semanas de ofertas, qué va a pasar con nuestro estado de bienestar. Y de qué manera va a afectarle esta tómbola de premios en un país que goza de una presión fiscal por debajo de la media europea. Convendría que aclarasen si seguirán deteriorando la sanidad, educación, dependencia, políticas de empleo, vivienda o pensiones y cuánto más va a caer nuestra calidad de vida. Es un asunto fundamental del que todos huyen.

Otras cuestiones a aclarar es cuándo se va a afrontar en profundidad una reforma fiscal que acabe con la competencia entre comunidades, la desigualdad entre ciudadanos y con un sistema tributario obsoleto y caótico. Y de paso que nos digan si se plantearon racionalizar el gasto público. Que es un absoluto disparate.

Legislar a golpe de encuesta es un desvarío. Pero es lo que hay. Y así nunca dispondremos de un sistema tributario equitativo y eficaz. Pero sí tendremos populismo y electoralismo. Y mucho sufrimiento.