El nacimiento del universo, fin del letargo

Manuel Luis Casalderrey
Manuel-Luis Casalderrey RINCÓN ABIERTO

OPINIÓN

NASA. Hubble

16 jul 2022 . Actualizado a las 05:00 h.

Como decía en el artículo anterior (La foto del James Webb), el nacimiento del universo se produce en el Big Bang, la gran explosión, el punto inicial en el que se formó la materia, el espacio y el tiempo. Toda la materia y la energía estaban extraordinariamente concentradas y el big bang las sacó de su letargo.

La teoría del big bang se formula a partir de la expansión del universo. Se basa en el efecto Doppler, ese que se percibe cuando un foco emisor de radiación se desplaza con respecto al observador o viceversa. Seguro que lo ha observado. Cuando una ambulancia, con la sirena funcionando, se acerca, se percibe un sonido más agudo y cuando se aleja, el sonido es más grave. El mismo fenómeno permite saber que las galaxias se están alejando unas de otras: la luz que emiten experimenta un corrimiento hacia el rojo, equivalente al sonido más grave. Si las galaxias se alejan unas de otras es que el universo está en expansión. Eso quiere decir que, tiempo atrás, las galaxias estuvieron más juntas, más juntas, más juntas… hasta tenerlas todas concentradas justo antes del inicio del big bang, que es el punto de partida, el nacimiento del universo.

En el gran colisionador de hadrones (LHC) del CERN en Ginebra, se van a hacer chocar protones de altísima energía (13,6 TeV) para recrear las condiciones que había inmediatamente después del big bang, en los primeros microsegundos de su existencia.