La Galicia rural y la brecha digital
Vivo en una pequeña aldea de Ourense, Outeiro da Torre, a 2,5 kilómetros de Maceda. Durante la mayor parte del año no somos más de quince vecinos, en su mayoría de avanzada edad. En marzo del 2021 extendieron, no sin problemas, el cable de fibra óptica, dando la posibilidad de contratar internet y televisión por cable. Lo hicieron añadiendo un cable más al tendido que soporta la telefonía fija y sin solicitar el preceptivo permiso cuando tuvieron que utilizar la pared de un vecino, e incluso la terraza de este.
Desde noviembre del 2021 el servicio está cortado, habiendo reclamado en múltiples ocasiones su reparación. Para ello, yo personalmente —y supongo que alguien más— me he puesto en contacto con el alcalde, con la empresa de telefonía, con los instaladores y hasta he elevado una queja a la Valedora do Pobo. Todo lo que hay que hacer es desplazar metro y medio la ubicación de un poste en terreno público para de esta forma reponer el servicio y retirar los cables que están en la propiedad del mencionado vecino.
Pues bien, a pesar de que en el entorno los postes se cuentan por decenas y que dentro de poco tiempo se retirara la línea ADSL, quedando solo la posibilidad de telefonía por fibra óptica, parece que la solución a nuestro problema no es posible.
Esta es la Galicia rural real y las deficiencias que impiden, por ejemplo, solicitar citas médicas desde casa o realizar transacciones bancarias sin tener que ir a la oficina, amén de trabajar desde el domicilio, etcétera.
Esta es la Galicia rural que nos facilitan nuestras administraciones, muy lejos de la que tratan de reflejar los eslóganes y la propaganda. ¿Podemos solucionarlo, por favor? Jorge Villar González. Outeiro da Torre (Maceda).
Cajeros automáticos: todo es mentira
Es la realidad misma, la situación en que se encuentran las personas mayores meses más tarde del impacto que produjeron las protestas del médico valenciano con sus famosos carteles. No se cumplen las promesas de atención personalizada, no existe la atención telefónica con línea para clientes mayores de 65 años. Diversos estudios realizados por empresas especializadas concluyen que el 90 % de nosotros, los mayores, no hemos observado mejora alguna ni en los cajeros ni en la simplificación de mejoras tecnológicas. Todo se ha quedado en el intento de tratar de contener la protesta generalizada de los pensionistas.
Los cajeros siguen estando en la calle y la interpretación de los mensajes confunden. Les preguntan cómo quieren el dinero, a crédito o a débito, pero muchos en ese momento no saben lo que eso quiere decir. Ellos solo quieren sacar el dinero que necesitan, nada más. Y si se equivocan de tecla, les cargan cuatro euros de comisión.
Es imposible que existan soluciones a las demandas formuladas por una razón incuestionable: las entidades bancarias siguen reduciendo personal y el que queda no es capaz de atender de forma que ayude a las personas mayores. Sucede lo mismo en las instituciones públicas, con especial incidencia en la sanidad. La sociedad en general está provocando un aumento del edadismo y frente a ello tenemos que reaccionar. Tenemos armas muy poderosas: diez millones de votos y la libertad de elegir a aquella entidad bancaria que resuelva nuestras necesidades. Juan José Lojo Fandiño. A Coruña.
Jota Peleteiro, vendedor de fume
Quero darlle as grazas a xunta directiva da SD Compostela, que non ao seu presidente. O señor Quinteiro daba por feito a venda do club a Jota Peleteiro cando realmente non estaba nada pechado e menos aínda asinado. Pero imos ver, quen é Jota Peleteiro? É un Ronaldo, un Beckham, un Raúl...? Cantas Champions gañou, cantas ligas? O que pasa é que ter un club de fútbol da un gran prestixio. Pero para ter un club de fútbol hai que traballar, non vale só cunha cara bonita.
As esixencias que poñía eran dunha prepotencia, desprezo e arrogancia inauditas. Quen é el para facer desaparecer todas as categorías inferiores do club, así como do persoal que traballa para o equipo, ou dos xogadores con contrato en vigor, ou para non querer aceptar subvencións ou axudas de pequenas empresas, cando son as que realmente sosteñen ao club?
Dáme moita pena que o señor Quinteiro aceptase todo isto, sen mirar máis aló do montante económico que ía ingresar. Oxalá me tocase a min o Euromillóns e puidese mercar o club. David Fernández.
Sánchez, el último decretazo
Ayer se publicó en el BOE otro decretazo de Sánchez, según el cual los jueces tendrán que suspender los desahucios, incluso los penales, con solo acreditarse vulnerabilidad social. Además, se obliga a las comunidades autónomas a que busquen una solución habitacional a los ocupantes ilegales. Todo ello lo silenció Sánchez en su rueda de prensa del sábado, porque la gente ya no ve con buenos ojos el permanente apoyo legal de Sánchez al llamado movimiento okupa. Un movimiento que asalta, a veces con violencia física y moral, las propiedades de la clase media trabajadora. José Luis Gardón. Madrid.