En España no todos somos iguales frente al cáncer. En función de la comunidad autónoma en la que nos encontremos, tendremos diferentes oportunidades para prevenir y detectar precozmente la enfermedad, y también podremos acceder a más o a menos prestaciones. Por desgracia, a veces el código postal pesa más que nuestro código genético. Desde la Asociación Española contra el Cáncer luchamos para acabar con esas desigualdades. Con motivo del Día Mundial Contra el Cáncer, clamamos por una mejora de los servicios en toda España que favorezca la equidad antes, durante y después del diagnóstico.
Un ejemplo: en las pruebas de detección precoz del cáncer de colon a través de sangre oculta en heces, los niveles de participación varían mucho en función de la autonomía. Galicia es de las primeras que han implantado el programa para toda la población diana: personas entre los 50 y los 69 años. Sin embargo, como se recoge en el primer informe sobre la inequidad en cáncer en España, en los últimos dos años solo el 46 % de estas personas se ha sometido a la prueba en nuestra comunidad. No es suficiente. Debemos seguir animando a la ciudadanía para que participe más y eliminar tabúes y miedos infundados.
También existen diferencias notables con respecto a la exposición al tabaco. El 42 % de las comunidades autónomas no protegen adecuadamente del humo de los cigarrillos, y cuatro de cada diez menores de doce años están expuestos a el en espacios públicos. El consumo de tabaco es la principal causa evitable de enfermedad, discapacidad y muerte en el mundo. Las comunidades y ayuntamientos tienen que adoptar las medidas que les corresponden para limitar este daño.
El nivel socioeconómico sigue siendo un importante factor de desigualdad frente al cáncer. En el 2021, en Galicia, 1.549 personas recibieron un diagnóstico de cáncer mientras se encontraban en situación laboral de riesgo, lo que dificulta hacer frente a los costes directos e indirectos que conlleva la enfermedad, que pueden superar los 10.000 euros.
La investigación es nuestra mejor esperanza. Se ha avanzado mucho en los últimos años, pero todavía hay 100.000 personas que, cada año, son diagnosticadas con tumores con una supervivencia baja o que se encuentra estancada, lo que pone de manifiesto la necesidad de un mayor apoyo a la investigación y a los investigadores. Es fundamental acabar con la desigualdad. Para abordar el problema, la Asociación Española contra el Cáncer aboga por un acuerdo amplio que cuente con el apoyo del mayor número posible de fuerzas políticas, sociales y económicas. Nos va la vida en ello.
