Las teles bajo el volcán

Beatriz Pallas ENCADENADOS

OPINIÓN

22 sep 2021 . Actualizado a las 08:43 h.

La erupción de La Palma no es un reclamo para un folleto turístico ni admite teorías de la conspiración. El drama que atraviesan estos días muchos palmeros es el peaje terrible de vivir en un paraíso construido sobre el magma a lo largo de los siglos. Si algo distingue esta explosión de todas las que ha habido anteriormente en el archipiélago canario es que esta está siendo retransmitida en riguroso directo por las televisiones. El volcán deja imágenes tan terroríficas como bellas desde que despertó domingo por la tarde, a la hora de la siesta, con la programación en velocidad de crucero y el piloto automático de las películas de sobremesa encendido. Pero la televisión pública canaria RTVC estaba allí para vivirlo en directo, con sus reporteros sobre el terreno desde antes de que la lava empezase a brotar y pidiendo entrar en directo en el momento en que el humo empezó a salir ante sus ojos. Fue la primera en reaccionar y su retransmisión fue exhaustiva e impecable, contando al mundo los ruidos y los olores de un fenómeno geológico apabullante. Absorbidos por la adrenalina de contemplar tan de cerca la primera erupción volcánica en España que han visto varias generaciones. En las horas siguientes el resto de las cadenas se sumaron a utilizar las coladas de lava como telón de fondo para sus informativos y descubrir, como diría Pedro Piqueras, que «la Tierra está viva».