«No quiero morirme sin ver limpio el puerto de Noia»

Cartas al director
Cartas al director CARTASALDIRECTOR

OPINIÓN

SIMÓN BALVÍS

12 ago 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

No quiero morirme sin ver limpio el puerto de Noia

Soy un ex armador, me dirijo a las autoridades competentes que tanto presumen del «puerto de Compostela», en mi querida Noia. Espero que sepan ustedes que es un vertedero, a pesar de ser un puerto histórico. ¿Cuándo piensan adecentarlo? Porque creo que no ignoran que en los tiempos pasados, con marea alta, atracaban embarcaciones de 2 a 300 toneladas donde ahora apenas puede entrar una jamela. Yo, Moncho O Ferreiro, a mis 79 años, no quisiera morirme sin ver mi puerto querido sin limpiar. Es el único puerto de Galicia en el que no ponen interés. Espero que esta palabras lleguen a buen puerto. Ramón Iglesias Lires. A Coruña.

Rastreo del covid

Catorce millones para el rastreo del covid por parte de una empresa privada. Una ingente cantidad de dinero que se podría emplear para contratar trabajadores del estanque de parados: de las listas del Sergas. Cientos de personas que se volverán locas esperando un Godot que no ha de llegar jamás. Porque los lumbreras, las mentes que gestionan los recursos de todos, han decidido traer de fuera lo que ya tienen dentro. ¿Se imaginan la cantidad de trabajadores que podrían abandonar las listas de parados del Sergas gracias a la aportación de 14 millones de euros de dinero público? Dinero que, por capricho de la Xunta, irá a parar a manos privadas. Es lamentable ver cómo las empresas privadas, que están siendo eliminadas de los espacios públicos —polideportivos municipales, parques de bomberos...— se cuelan de nuevo en la Administración para, posiblemente, más tarde, intentar quedarse como funcionarios, sin opositar. Lo que ya pasó con el personal de las fundaciones: entraron a dedo y luego se hicieron con una plaza en el Sergas, sin OPE. Y mientras tanto, los sacrificados opositores están a la espera de que cambien las tornas. Xiana del Cabo. Santiago.

Sobre la cobertura de 5G en el rural

El pasado domingo La Voz de Galicia publicó un reportaje donde Manuel Ángel Alonso, director territorial norte de Telefónica, habla de las antenas 5G. Me parece bien, pero no dice nada de que hay muchas zonas de Galicia donde la cobertura es nula, zonas enteras, pueblos y aldeas de las zonas rurales. Mucho se habla de la España vacía, pero nadie hace nada. Usted dice que el 78 % de la población tiene cobertura, permítame dudarlo.

Le pongo un ejemplo: en el pueblo de Pereira de Montes, Concello de A Merca y toda su zona (Ourense) hay escasa cobertura, y solo en la zona alta. La Comunidad de Montes ofrecimos el terreno suficiente en una zona alta y ustedes no dicen nada; incluso hablamos con la Diputación de Ourense, con muy bonitas palabras nos prometieron ayuda, pero ineficacia total. Ramón Rodríguez Conde. Pereira de Montes (a Merca).

Gracias, Toxo

Te has marchado de forma inesperada, antes de tiempo. Has dejado un gran vacío en la familia.

Todavía recordamos cuando, siendo un cachorro, con un año de vida, te encontramos en casa empalado con un tronco de eucalipto. Nosotros nos ausentamos poco más de media hora. (La Voz de Galicia, 29-01-14). Habías sido noticia.

Saliste del trance con salud y esfuerzo, sin quejas ni reproches, fuerte, dócil y muy cariñoso con todos, sin traumas.

Eres y serás siempre de las mejores experiencias de nuestra vida, un ejemplo de vida, de amistad y de lealtad. Nuestro mastín bonito. Del nombre no tenías las espinas, poseías la belleza, la fortaleza y la flor. Buen viaje, querido amigo. Nito Varela Barcón. Espasante (Ortigueira).

El castellano en Cataluña: otro curso de humillación

Las nuevas resoluciones judiciales sobre el castellano ratifican que la Constitución sigue sin cumplirse en Cataluña. Si la ministra de Defensa ha calificado de «elucubración» la sentencia que declara inconstitucional el confinamiento por el coronavirus, ahora podrán decir lo mismo en Cataluña sobre los autos judiciales que imponen un 25 por ciento de castellano en las aulas. Además, como los autos son recurribles ante el Tribunal Supremo, la ministra de Justicia dirá que ve «muy probable» que el Supremo estime los recursos. Y así, con el Gobierno de Pedro Sánchez, Margarita Robles y Pilar Llop siempre del lado de los enemigos de España, los niños de Cataluña pasarán otro curso de humillación, solo porque sus padres quieren que usen y conozcan el castellano. José Luis Gardón. Madrid.

Mediterráneo

Una mentira más dentro de la gran mentira, esto es lo que supone la salida de Leo Messi de esta Cataluña destrozada por los propios catalanes. Esos que son nacionalistas e independentistas, seguro que muy buena gente, pero comulgando con ruedas de molino.

Cuando se les acabe el negocio recíproco con un Gobierno que no los necesite agónicamente para gobernar y caigan en la cuenta de todo lo que han dilapidado, la deuda del Barça será una broma comparada con la ruina total de su país. Aniquiladas poco a poco las instituciones democráticas, el poder público del que emana el ejecutivo, el legislativo y el judicial.

Cuando no tengan a nadie para echarles la culpa, solo les quedara cantar al mítico Serrat, que ya avisaba: «Que le voy hacer/ si yo nací en el Mediterráneo». Antonio Ferreira-Rocha Castiñeiras. A Coruña.

Beirut, un año después

Un año después de las explosiones que destruyeron el puerto y buena parte de Beirut, la capital del Líbano, y causaron más de un centenar de muertos, el papa Francisco hizo un nuevo llamamiento a la comunidad internacional para pedir que ayude con hechos concretos al martirizado país. Sus palabras coincidieron con una conferencia patrocinada por Francia y la ONU destinada a desbloquear las numerosas ofertas de ayuda que se prometieron ante la inmensidad de la catástrofe y que todavía no se han hecho efectivas. De momento se ha conseguido poner en marcha un tramo de 370 millones de dólares destinados a la reconstrucción de Beirut, que aún sigue envuelta en escombros.

Pero el gran problema con el que se enfrentan los países donantes y el propio Líbano, sumido en una profunda crisis económica y social, no es solo la falta de dinero, sino la corrompida clase política, incapaz de formar un nuevo gobierno, mientras la Justicia se ve también impotente para investigar y castigar a los culpables de la catástrofe. Jesús Domingo Martínez. Gerona.