Amazon y la Metro: el león acabó siendo la presa

César Rodríguez Pérez
César Rodríguez JUEGO DE TRONOS

OPINIÓN

DADO RUVIC | Reuters

28 may 2021 . Actualizado a las 07:43 h.

Uno de los emblemas de la época dorada del cine de Hollywood es el león de la Metro Goldwyn Mayer. El felino que rugió en el arranque de tantas y tantas películas que marcaron una época ya no luce una melena tan lustrosa. Y se ha convertido en un gatito, que maullará dentro del descomunal universo Amazon.

La empresa de Jeff Bezos pagó 7.000 millones por el casi centenario estudio. En ese precio van incluidos los derechos sobre un buen puñado de clásicos del cine y de franquicias muy rentables. También el saber hacer de una compañía que no es un dinosaurio, sino que ha demostrado en los últimos tiempos que es capaz de hacer series tan memorables como Fargo o Vikingos.

La adquisición tiene mucho sentido si se mira en el contexto de la guerra mundial por el dominio del streaming que libran con Netflix o Disney. Amazon refuerza su catálogo audiovisual y su capacidad de hacer contenidos. Pero hay mas razones. Los suscriptores que utilizan habitualmente el servicio de vídeo adquieren más productos y están dispuestos a pagar más dinero al año por la pertenencia al club de usuarios Prime que no pagan gastos de envío. Ahí está la clave. El león acabó siendo cebo.

Compras de todo en Amazon, lees en un Kindle, le hablas a Alexa, alojas tu web en la nube AWS, escuchas música Unlimited (y la das con calidad total para torpedear a Spotify)... Y cuando la dependencia sea total, ¿serás capaz de salirte del circuito?