Bosé, el negacionista

I. Bermúdez de castro PASOS SIN HUELLAS

OPINIÓN

20 abr 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

Si cualquier ciudadano de esos que no conocen en su casa ni a la hora de comer dice las barbaridades que soltó Miguel Bosé en el programa de Jordi Évole, poca repercusión tendrán sus palabras. Pero resulta intolerable que un personaje tan mediático como el actor y cantante nos venga con un argumento tan insostenible como el de que el coronavirus es un invento de sabe Dios quién. Con una absoluta falta de respeto a los más de tres millones de muertos que se ha llevado por delante el maldito bicho ha frivolizado de tal forma que he sentido vergüenza ajena de una manera que hacía mucho tiempo que no sentía. Sin pararse a pensar, o sí, que lo que dice alguien como él desgraciadamente es tomado en cuenta por muchos seguidores, ha rebajado al covid-19 a la categoría de resfriado de tercera. ¿Cómo se puede ser tan insustancial a sabiendas de que toda la comunidad científica internacional está en pie de guerra contra la pandemia? Lo podría, hasta entender, de alguien que necesitara sus cinco minutos de gloria para seguir viviendo. Pero de un personaje como Bosé solo se comprende si damos por bueno que ha empezado a perder la cabeza o que necesita que se hable de él para volver a vender discos si algún día recupera la voz. Siempre le gustó llamar la atención. Se creó una personalidad arrolladora a costa de sus extravagancias. Eso es una cosa y otra muy distinta es convertirte en el abanderado de los que pretenden negar lo innegable. Caiga quien caiga poco les importa.