Las ayudas no son un regalo

Lorenzo Amor PRESIDENTE DE LA FEDERACIÓN NACIONAL DE ASOCIACIONES DE TRABAJADORES AUTÓNOMOS (ATA)

OPINIÓN

14 feb 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

Sí. Las ayudas directas son imprescindibles, vitales, urgentes y de justicia. Y es para lo que deben servir los millones que vienen de Europa. Sin nuestro tejido productivo -conformado por un 90 % de autónomos, micropymes y pymes- en España y en Galicia no se puede hablar de empleo.

Desde ATA reclamamos ayudas directas para los autónomos que deben llegar de manera inmediata al colectivo y ser un rescate real. Más del 90 % de los autónomos y empresas eran viables a mediados de marzo de 2020 y sin embargo, las dificultades que hoy sufren muchos sectores, no son por culpa de su gestión o sus decisiones empresariales. Las restricciones, los cierres, las limitaciones, las han decretado las distintas administraciones.

¿Quién determina la viabilidad de un autónomo o empresa? ¿Con qué criterio? ¿Qué base medible y técnica va a determinar que un bar es viable y otro no?

Durante meses no se ha hecho un análisis ni se ha reconocido una situación que algunos ya advertíamos. ERTE, ayudas por cese de actividad y moratorias no eran suficientes para salvar empresas, autónomos y empleos. Y no lo decimos solo desde nuestra federación. El BCE, el FMI les ha puesto la cara colorada a aquellos que tienen que procurar que los autónomos sigan siendo viables. Lo que es indudable es que estarían mejor los autónomos si se hubieran puesto ya en marcha una batería de ayudas directas como hizo en su momento Alemania y otros países UE.

Y que no digan que no hay dinero para salvar empleos. Tras la salud no se me ocurre nada más importante en lo que invertir esos millones que vienen de Europa. Junto con CEOE y Cepyme hemos presentado al Gobierno 21 iniciativas estratégicas de país para la recuperación y transformación de la economía española. Si no saben cómo invertir… ahí tienen la solución.

Las ayudas directas a autónomos que debe poner en marcha el Estado no son ningún regalo. Son una indemnización, una compensación a sus pérdidas, por seguir pagando los gastos corrientes, a pesar de no tener actividad. Cuidado con poner tiritas a hemorragias. Ya no es un problema de financiación, es un problema de solvencia, de supervivencia.

El Gobierno gallego destinará 75 millones de euros a tres líneas de ayuda: personas trabajadoras autónomas, microempresas y sector de la hostelería y otras actividades cerradas. Es un ejemplo a seguir. Aunque, por experiencias anteriores, en la tramitación perdemos en agilidad por lo que cuando la ayuda quiere llegar es tarde para el autónomo. Pero es evidente, que con ayudas directas, saldremos antes de esta crisis económica. Como con la vacuna, de la sanitaria.