Portugal ya no está al oeste

Xose Carlos Caneiro
Xosé Carlos Caneiro EL EQUILIBRISTA

OPINIÓN

PEDRO NUNES

07 dic 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

Vivo a quince kilómetros de la frontera portuguesa. Nuestra ciudad de referencia, la más cercana, es Chaves. Aproximadamente 46.000 habitantes. Allí lo están pasando muy mal: bastante más de 2.200 casos de covid confirmados. A Chaves se pueden unir los territorios de Montealegre, Boticas, Ribeira de Pena, Valpaços o Vila Pouca de Aguiar. Es lo que queda más cerca de las comarcas del sur de Ourense, que presentan una considerable distancia con lo que sucede en el norte de Portugal.

Observando sus datos, vinieron a mi cabeza las palabras lejanas de la ministra Teresa Ribera, vicepresidenta cuarta del Gobierno eufórico que está a punto de aprobar unos Presupuestos que han dejado a Galicia trasquilada. Los Presupuestos son tan onerosos que el BNG, hasta ahora socio del PSOE, ha votado no en los trámites. Ha sido una respuesta honesta y consecuente. ¿Qué más decir? ¿Qué añadir a lo evidente? Yo solo un ruego: por favor, señores del PSOE gallego, no lastimen nuestra inteligencia intentando justificar lo que no tiene justificación alguna. Dejo el asunto. Y me voy a Portugal y al mes de mayo, cuando Galicia, como ahora, era ejemplo afrontando la pandemia. No es una apreciación abstracta sino que está fundamentada en sus números. Los de entonces y los de ahora: mucho mejores que los del resto de España. Sin embargo algo había que decir. Y una ministra, arriba citada, dijo (sic): «Portugal paró antes. Venía del este y ellos están un poco más al oeste y entonces pudieron parar un poco antes. Allí ha habido un comportamiento por parte del conjunto de la sociedad y por parte de las fuerzas políticas mucho más compacto, de ayudarse». Ahí queda eso. Dos factores ayudaban a Portugal. Uno, la oposición, que no era cruel como la española. Dos, la situación geográfica. Este segundo factor servía también para significar el éxito de Galicia: como está al oeste, las cosas le van mejor que al resto. Era una forma de menospreciar la eficiencia de la Xunta. ¿Y qué dirán ahora? ¿Que a Galicia (menos en los presupuestos) las cosas le vayan mejor que al resto, es imputable a su ubicación?

Imagino que en este momento los asesores del Gobierno Sánchez/Iglesias están buscando en el baúl de las ideas qué argumentario esgrimir. ¿Cómo es posible que a quince kilómetros de mi pueblo se esté viviendo una situación de auténtica calamidad y en Verín apenas haya contagios? Yo se lo cuento: porque las medidas que ha aplicado el Gobierno de los gallegos, aun pudiéndolas discutir, han dado unos resultados excelentes. El Ejecutivo portugués ya no es ejemplo para sus cofrades españoles. La oposición, tampoco. Quizá ahora Portugal ya no está al oeste.