El diputado y la orgía

Mariluz Ferreiro A MI BOLA

OPINIÓN

06 dic 2020 . Actualizado a las 10:03 h.

Puede que no exista una forma más contundente de romper las restricciones por la pandemia. Un eurodiputado en una orgía multitudinaria en un piso de Bruselas. Es para nota. Y no un eurodiputado cualquiera. Es József Szájer. Se trata de un señor compañero de filas de Víktor Orbán que de cara al público santifica el matrimonio como la unión entre un hombre y una mujer, y así lo dejó plasmado en la Constitución de su país. Pero tuvo la mala suerte de acabar en calzoncillos en un festín sexual homosexual. Esa frase que ha arropado tantas resacas, la de «me liaron», cobra un nuevo sentido. El derecho a la incoherencia se acaba cuando alguien es político e impone valores que solo son una fachada. El programa humorístico Little Britain emitió hace años varias versiones del mismo sketch en el que el protagonista bien podría ser un allegado de Szájer. Un político comparecía en rueda de prensa junto a su mujer para explicar un lamentable malentendido. No es que lo hubieran pillado teniendo sexo con un chaval a cambio de dinero. No. El tipo era un hombre familiar que tenía una explicación para lo ocurrido. Iba por la carretera y vio a un rastafari bastante joven caminando por el arcén. Como era uno de sus votantes, se vio en la obligación de pararse y llevarlo en su coche y debatir unas cuestiones. Durante el viaje, se detuvo en un callejón cercano para meter la mano en la guantera y sacar sus caramelos de menta. «Y, justo en ese momento, me caí encima de él y lamento decir que una parte de mi cuerpo entró accidentalmente en él. En lo que a mí respecta, ese es el final del asunto. Gracias». Así acababa la intervención. Sin duda, la historia de Szájer tiene que ser muchísimo mejor.