¿Quién dijo crisis? Hay dinero «pa tó»
Helos ahí: ¡los Presupuestos Generales del Estado! Tan solemnes, que hasta Pablo Iglesias se puso corbata para presentarlos. Tan reñidos, que presidente y vicepresidente no llegaron a un acuerdo hasta el último minuto, cuando empezaba a sonar la campana y los periódicos empezaban a dudar de que se pudieran presentar. Tan trabajados, que en su trayecto hasta el Consejo de Ministros conocieron vetos entre partidos, líneas rojas, incontables presiones y anuncios de desgracias por la participación de un partido enemigo de los poderosos. Según algunos pesimistas, hasta podrían conducirnos a una economía bolivariana. Y al final del trayecto, después de que Sánchez e Iglesias hicieran su representación de la doble cara del gobierno de coalición, desde las paredes de la Moncloa se me comunicó a lo grande: «En el año más difícil de nuestra historia, con la mayor calamidad en un siglo, el Gobierno resistió. Y resistir es avanzar». Parecía el parte final de una guerra.