El litio (Li) se ha impuesto sobre el resto de los metales, como elemento químico imprescindible en la fabricación de pilas y baterías. El litio es el metal más ligero y por eso tiene una carga específica de 3860 amperios.hora/kilogramo (Ah/kg), mucho mayor que la del cadmio (470 Ah/kg) y que la del plomo (260 Ah/kg). Además, su menor densidad, permite obtener la misma energía con una masa menor. Así, la masa necesaria para producir un amperio durante una hora es de 0,26 g de litio, 2,13 g de cadmio y 3,85 g de plomo. La demanda creciente de litio está creando tensiones sobre los países que tienen minas de este metal.
Además de en las baterías, el litio está presente en un fármaco, cuyo principio activo es el carbonato de litio (Li2CO3), que se usa para prevenir y tratar los trastornos bipolares (alteraciones del estado de ánimo, en los que se alternan temporadas con depresión con otras de gran euforia) y la depresión mayor recurrente (episodios repetidos de depresión severa). Ahora, el carbonato de litio se está usando para tratar a pacientes con covid-19 en un ensayo realizado por investigadores del grupo de Neurociencia Traslacional del Instituto de Investigación Sanitaria Galicia-Sur. En el ensayo clínico se pretende demostrar que el carbonato de litio tiene capacidad antivírica, que refuerza el sistema inmunitario activando los linfocitos T y que es antiinflamatorio. Nada menos.